Las autoridades chilenas han confirmado que tres carabineros han muerto a tiros y han acabado calcinados en un ataque ocurrido en Wallmapu, territorio mapuche, al sur del país, en un incidente que ha llevado al presidente, Gabriel Boric, a declarar el estado de luto nacional y a suspender su agenda para desplazarse hasta allí.

Los tres agentes de la policía militarizada chilena estaban patrullando por la comunidad de Cañete, provincia de Arauco, en la región de Biobío, cuando se enzarzaron en un tiroteo con atacantes desconocidos, quienes, según la versión policial, tras matar a los agentes, prendieron fuego al vehículo en el que se encontraban.

El suceso ha ocurrido el día en el que Carabineros de Chile celebra con un desfile su aniversario, en una de las zonas más conflictivas de Biobío, próxima a una ruta que enlaza las comunidades de Cañete, Quidico y Tirúa. 

La vecina región de La Araucanía, bajo estado de emergencia desde mayo de 2022 en un intento por controlar los ataques, en su mayoría sabotajes incendiarios, es la región chilena con mayor concentración de indígenas mapuche, que desde hace años exigen la devolución de sus tierras ancestrales y denuncian un hostigamiento por parte del Ejecutivo.

Las autoridades han negado en repetidas ocasiones estas acusaciones y apuntan a los nativos como los responsables de numerosos incidentes violentos en la zona, como ataques a fincas y a sus propietarios.

El ataque ha tenido lugar la misma semana en que la justicia ha declarado culpable de «usurpación violenta de predio», hurto y «atentado contra la autoridad» a Héctor Llaitul, líder de la Coordinadora Arauco-Malleco (CAM), una de las organizaciones que ha reivindicado ataques incendiarios en la zona.

Llaitul se enfrenta a hasta 25 años de cárcel por esos delitos, en una sentencia que la Justicia dará a conocer el próximo 7 de mayo.

«No habrá impunidad»

Boric se ha reunido de madrugada con las ministras Carolina Tohá (Interior) y Maya Fernández (Defensa), los subsecretarios Manuel Monsalve y Ricardo Montero, y la delegada presidencial de Biobío, Daniela Dresdner, para «coordinar las acciones inmediatas para responder a este cobarde atentado».

«Les aseguro a los chilenos y chilenas que no habrá impunidad y que daremos con el paradero de los autores de este terrible crimen. Por último, he decidido decretar Duelo Nacional por tres días en todo el país. Sepan, Carabineros de Chile, que no están solos», escribió Boric en las redes sociales.

Dresdner ha explicado tras el encuentro con Boric que lo ocurrido pone de manifiesto que el descenso de los últimos meses de los ataques en la ruta Cañete-Tirúa no significa el fin de la violencia en una zona que ha concentrado más de 75 ataques de esta naturaleza desde 2020.

El jefe de Carabineros, general Ricardo Yáñez, ha lamentado que «una vez más cargamos con el luto, con el peso de un cruel y vil asesinato. Fueron terriblemente asesinados tres carabineros que se encontraban cumpliendo y brindando seguridad, en una zona que sabemos que es compleja».