En el pleno de control al Gobierno del Parlamento de Gasteiz, Pello Otxandiano ha defendido ante el lehendakari el modelo de armonización de gastos e ingresos entre las instituciones de la CAV y su propuesta de negociar los presupuestos y la reforma fiscal. Le ha recordado a Imano Pradales que PNV y PSE no tienen mayoría suficiente ni en Gipuzkoa ni en Araba y, dado que hay lobbys que están intentando condicionar esa reforma, le ha señalado que si pretenden elegir el modelo fiscal de la Comunidad de Madrid, deberá pactar con el PP, pero que si prefiere el de los estados más avanzados socialmente de Europa habrá de hacerlo con EH Bildu.

Imanol Pradales le ha respondido diciendo que «usted cita a los estados de Europa pero Sortu firma con el Partido Comunista de Cuba un acuerdo estratégico para los próximos cinco años», algo que ocurrió el pasado 11 de junio. Ha acusado a EH Bildu de ser como el baserritarra del monte Serantes que dice que conoció de niño que dejó exhaustas a sus vacas de tanto ordeñarlas, por lo que ha asegurado que él es más de cuidar y alimentar bien al rebaño para que aumente la producción y poder repartir.

El portavoz parlamentario de EH Bildu ha iniciado su intervención denunciando el secretismo que existe sobre la reforma fiscal, donde solo se sabe que hay un acuerdo en Gipuzkoa y que parece que el PNV y el PSE no se ponen de acuerdo entre ambos socios en otros lugares. Les ha preguntado «qué pretenden hacer» y se ha respondido que «aquí es donde se demuestra la virtualidad de la propuesta que ha hecho EH Bildu de cara a los presupuestos de 2025: armonizar políticas públicas, las de ingreso y las de gasto en aquellos ámbitos que creamos estratégicos».

Sobre Andueza e Imaz

Ha retomado las palabras de Imanol Pradales diciendo que no se fiaba de EH Bildu, al igual que hay gente entre sus filas que no se fía del lehendakari. Otxandiano ha señalado que no sabe si en ambos casos hay motivos para la desconfianza, pero ha sido rotundo al afirmar que  «lo que tengo claro es que quien aquí está haciendo una oposición muy poco constructiva a este Gobierno, prácticamente todas las semanas, es el señor Andueza».

Otxandiano ha incidido en que «no sé si tiene usted motivos para desconfiar de él, pero creo que acumula motivos para empezar a estar molesto. Después de 45 años de incumplimientos y erosión del autogobierno hasta su mutilación, en un alarde de soberbia política, esta semana se ha preguntado a ver qué es lo que hay que decidir».

Dirigiéndose al lehendakari, Otxandiano ha apuntado que «yo no le voy a decir que quiere bajar los impuestos a sus amigos, como hizo Andueza», pero sí le ha recordado que Josu Jon Imaz habla para defender los intereses de una gran corporación del sector de los hidrocarburos y eso explica las opiniones que da sobre la fiscalidad y la transición energética.

Pello Otxandiano le ha recordado al lehendakari que EH Bildu ha hecho una invitación para el diálogo y negociación, y ahí es donde ha planteado la necesidad de elegir entre el modelo del PP o el de la izquierda soberanista.

Pradales, optimismo y prueba

Tras hablar del Partido Comunista de Cuba y de las vacas de Mamariga, el lehendakari le ha espetado a Pello Otxandiano que «esto no va de dogmas» y «ustedes no son la quinta esencia de la democracia más avanzada de Europa y el modelo más avanzado en lo socioeconómico. Esto va de garantizar el bienestar y el empleo de las personas».

En todo caso, Pradales le ha dicho a Otxandiano que ha visto en sus filas algunos cambios en las últimas semanas, por lo que «voy a mantener el optimismo». Y ha añadido que EH Bildu tendrá en las próximas semanas la posibilidad de mostrar su visión de país, si tiene «la misma vara de medir a los dos lados de la sierra de Aralar y Urbasa. No sé a cuánto estará su kilo presupuestario en la azoka de Iruñea y en la azoka de Gasteiz. Tendremos tiempo de comprobarlo».

Por otra parte y en respuesta a una pregunta del PNV, el lehendakari ha anunciado que para el próximo 13 de noviembre ha convocado en Ajuria Enea a las diputaciones y a Eudel, además de al Departamento de Gobernanza, Administración Digital y Autogobierno, para ver cómo «mejorar y adecuar la eficacia de la administración pública, para hacerla más ágil, rápida y competitiva, adaptada al siglo XXI.