Pello Guerra
Redactor de actualidad / Aktualitateko erredaktorea

Solo en enero se han presentado 16 solicitudes de víctimas de violencia del Estado en Nafarroa

Solo en enero se han presentado 16 solicitudes para obtener el reconocimiento como víctima de la violencia del Estado en Nafarroa, según han anunciado responsables de Egiaren garaia da, que han valorado muy positivamente que todos los grupos parlamentarios, salvo Vox, reconozcan que se ha torturado.

Imagen de archivo de una manifestación de la Red de Torturados de Nafarroa.
Imagen de archivo de una manifestación de la Red de Torturados de Nafarroa. (Endika PORTILLO | FOKU)

Un total de 16 solicitudes para obtener el reconocimiento como víctimas de la violencia del Estado en Nafarroa se han presentado solo en enero de este año, según ha desvelado este jueves Egiaren garaia da. Esta dinámica ha hecho una valoración muy positiva de la segunda memoria de la Comisión de Reconocimiento y Reparación de Víctimas por actos de motivación política del herrialde, que fue presentada el pasado martes en el Parlamento por su presidente, Martín Zabalza.

En una comparecencia ante los medios, los portavoces de la citada dinámica, Mikel Soto, de Torturaren Sarea, y Ainara Gorostiaga, de Egiari Zor Fundazioa, han señalado que, hasta el momento, se han registrado un total de 142 solicitudes para obtener el reconocimiento de víctima de violencia del Estado, sumando las 51 presentadas en 2023, las 75 del año pasado y las 16 que ya se han tramitado en este primer mes de 2025.

Gorostiaga ha matizado que en 2023 hay una solicitud más de las que expuso públicamente en su memoria Zabalza, ya que Egiaren garaia da suma el caso de Naparra y que la comisión no incluye a pesar de que ha sido registrada, porque está «paralizada temporalmente», a la espera de la resolución del expediente que se presentó también ante la comisión que se ocupa de esta materia en la CAV.

En relación a las 142 solicitudes, ha detallado que 107 han sido tramitadas desde Egiari Zor y que un total de 96 están relacionadas con las torturas, lo que «evidencia la importancia» de esta práctica. En este sentido, ha profundizado en los datos, indicando que «actualmente hay registradas 375 personas torturadas en el censo que manejamos. 66 personas no quieren o pueden participar en el proceso y 309 están identificadas sin repartirles la carpeta».

Ha añadido que «la recogida de los datos obtenidos de los formularios recibidos y del censo elaborado ofrece una fotografía tan nítida como terrible que sigue creciendo al seguir recibiendo información y testimonios. Pero, a fecha de 22 de enero de 2025, entre 1960 y 2011, en Navarra ha habido 1.104 casos de tortura y 896 personas torturadas».

Consecuencias de esa violencia

Gorostiaga ha ofrecido otros datos relacionados con la violencia del Estado en el herrialde, como las 42 víctimas mortales registradas en diferentes circunstancias y las 246 personas heridas «censadas por Egari Zor, pero prevemos que sean muchas más aún sin censar» y que corresponden a momentos como «Montejurra, San Fermín 78, manifestaciones, Aberri Eguna, Nafarroa Oinez, Olentzeros...».

Como consecuencia de esa violencia se registraron 12 fracturas, 31 heridos de bala, 19 amenazas, 133 heridas con contusiones severas, 26 traumatismos, 12 pérdidas oculares, tres heridos por envío de paquetes bombas e incluso una violación, entre otras.

Estos datos van aflorando a medida que se van presentando solicitudes, un proceso complicado y que no todas las víctimas se ven con fuerzas de afrontar, ya que supone revivir lo sufrido varias veces y «confiar en unas instituciones que hasta ahora no nos han amparado», según han destacado los portavoces de Egiaren garaia da. El propio Soto ha reconocido que, tras tener toda la documentación de su expediente preparada, «me ha costado tres meses firmar la solicitud».

Es un proceso doloroso y tras obtener el reconocimiento, en ocasiones «surge la pregunta ¿y ahora qué?». Pero han recordado que hay que tener en cuenta que en julio de 2027 finaliza el plazo para poder presentar solicitudes, aunque ya han adelantado que si al llegar esa fecha, «hay algunas por meter, pediremos que se amplíe el plazo».

Ainara Gorostiaga y Mikel Soto, en su comparecencia ante los medios. (NAIZ)



Del trabajo realizado hasta ahora por la comisión y sobre la memoria presentada por su presidente en el Parlamento el pasado martes, Soto ha valorado «muy positivamente los pasos que se están dando para el reconocimiento de las víctimas de la violencia policial en Navarra».

Además, ha puesto en valor que durante la presentación de esa segunda memoria en la Cámara, «todos los grupos parlamentarios, a excepción de Vox, que no acudió, todos absolutamente, reconocieron esa violencia que se había ejercido y la denunciaron, incluidas las torturas y los malos tratos, como dijo la portavoz de UPN. Cada cual en sus términos, con sus propias palabras, como es normal, pero sí hubo un reconocimiento de que en las últimas décadas en Navarra, en los distintos contextos políticos, ha habido violencia de motivación política».

En este sentido, ha recordado que «somos miles de personas las que la hemos sufrido y que va desde torturas, hasta desapariciones, heridos en manifestación, muertos en controles policiales, víctimas de la política penitenciaria especial, agresiones, atentados, tanto contra bienes como contra personas por parte de la extrema derecha, etcétera».

Ha recalcado que «se está acabando con el negacionismo sobre la tortura» y que el reconocimiento de la violencia del Estado «nos parece un paso muy positivo en el ámbito de la convivencia y queríamos agradecer a la comisión su profesionalidad y la labor que está haciendo. Sabemos que no tiene que ser fácil estar conviviendo un largo tiempo con todo ese sufrimiento que hay detrás de cada uno de esos expedientes».

Acto con la presencia de Chivite

También ha valorado positivamente que «se celebre anualmente un acto público de reconocimiento», como el previsto para el próximo 13 de febrero, pero ha indicado que «queremos solicitar la participación en el mismo de María Chivite, en la medida en que es la mayor representación de Navarra en ese acto, porque nos parece que es de justicia y es un paso positivo a la hora de ir construyendo esa memoria colectiva e inclusiva, y esa convivencia basada en valores de justicia y derechos humanos».

Soto ha recordado que la comisión no tiene una finalidad punitivista y ha asegurado que lo contrario, «no solucionaría nada, pero contar la verdad, por qué lo hicieron y quién ordenó hacerlo, ayudaría para que en el futuro no se repita». Y ha puesto el acento en que «no tenemos el mismo estatus que las víctimas de ETA y eso debe cambiar, porque no hay violaciones de derechos de primera o segunda. Eso habría que abordarlo».

Finalmente, ha destacado que el trabajo de la comisión «irá aflorando la existencia de unos patrones, qué cuerpos policiales han practicado torturas en años concretos, en comisarías concretas. Se empezarán a visualizar esos patrones y es triste decir que nos van a dar la razón de lo que veníamos denunciando». En ese sentido, ha señalado que, a futuro, «no descarto que alguien nos pida perdón, que algún responsable de esos cuerpos pida perdón. Para nosotros sería muy importante y reparador».