Merlier se ha impuesto con autoridad en la primera etapa de la París-Niza.
Merlier se ha impuesto con autoridad en la primera etapa de la París-Niza. (Anne-Christine POUJOULAT | AFP)
NAIZ

Tim Merlier (Soudal Quick Step) impone su velocidad y estrena el liderato de la París-Niza

El vigente campeón de Europa ha impuesto su punta de velocidad en la meta Le Perray-en-Yvelines. Mikel Landa y Pello Bilbao toman este lunes la salida en la Tirreno-Adriático como jefes de fila de sus respectivas escuadras.

El campeón de Europa Tim Merlier (Soudal Quick Step) es el primer líder de la 83ª edición de la París-Niza al imponerse con autoridad al sprint en la primera etapa disputada con salida y llegada en Le Perray-en-Yvelines, con un recorrido de 156.1 kilómetros.

El ciclista belga, de 32 años, ha irrumpido en la llegada masiva con total autoridad a falta de 75 metros de meta para entrar con su maillot de ganador continental brazos en alto, batiendo al francés Arnaud Demare (Arkea) y al italiano Alberto Dainese (Tudor).

«Primera victoria de etapa en esta prueba, estoy orgulloso de ello. Visma puso nervioso al pelotón, luego atacó el Tudor de Alaphilippe, pero estuvimos atentos, el equipo me colocó bien y pude disputar con éxito», ha comentado Merlier en meta.

El belga, que suma su quinta victoria de la temporada y la 55ª como profesional, encabeza la general con 6 segundos de ventaja sobre Demare y el ecuatoriano Jhonatan Narváez (UAE). Este lunes se disputa la segunda etapa, entre Montesson y Bellegarde, de 183.9 kms.

Landa y Bilbao, en Italia

Mikel Landa (Soudal Quick Step) y Pello Bilbao (Bahrain) llegarán con galones de líder de sus respectivos equipos en la histórica 60ª edición de la Tirreno-Adriático que comienza este lunes en Lido di Camaiore (Italia) con una contrarreloj corta de 11,5 kilómetros.

La ‘Carrera de los dos Mares’, que se disputa hasta el domingo, pondrá a prueba a varios aspirantes al próximo Giro, con 7 etapas y un total de 1.147 kilómetros.

Landa afronta su primera prueba por etapas de esta temporada tras su undécima posición en la Strade Bianche, prueba en la que Bilbao terminó quinto.