Al buque Aita Mari no le han permitido acceso al puerto de Palma de Mallorca. Las autoridades han ordenado «que se mantenga a la espera», por lo que permanece a tres millas de Palma aguardando el despacho necesario para poder continuar ruta a Lesbos con su misión humanitaria. Allí, a su vez, esperan «la llegada del material sanitario e higiénico que llevamos a bordo para aliviar un poco la dramática situación en los campos de refugiados», han recordado desde la ONG Salvamento Marítimo Humanitario (SMH).

«No nos han autorizado la entrada, nos han dicho que nos mantengamos a la espera», han señalado a NAIZ activistas de la ONG. Según han explicado, responsables de SMH se han trsasladado al lugar y se encuentran realizando los trámites necesarios en la Capitanía de Mallorca, por lo que confían en que en el plazo de unas horas consigan el despacho para poder continuar con su viaje a Grecia.

«Mantenernos fuera del puerto para no darnos el despacho no es algo lógico», han apuntado las mismas fuentes, aunque han precisado que la decisión de no dar acceso al Aita Mari a puerto puede deberse a la presencia en la bahía de un portaaviones norteamericano.

La ONG ha recordado a través de una nota que el buque de rescate Aita Mari recibió órdenes la noche del sábado del Gobierno español de poner rumbo a puerto, interrumpiendo la misión humanitaria en Grecia. «Obedeciendo dichas órdenes pusimos rumbo a Palma de Mallorca y mantenemos comunicación con la Autoridad Marítima para conocer el motivo de la interrupción», han precisado.

Han recordado que «desde el 18 de nero, España nos impide navegar en misiones de búsqueda y rescate de náufragos en el Mediterráneo central». «Por esta razón, y puesto que el barco cuenta con una clínica médica a bordo, decidimos modificar la misión por ahora y servir como unidad humanitaria en Lesbos», han indicado.