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Miles de personas piden en Escocia un segundo referéndum de independencia

Miles de personas han marchado por las calles de Glasgow, la ciudad más grande de Escocia, para pedir la celebración de un segundo referéndum de independencia, diez días después de que Nicola Sturgeon se comprometiera a impulsar una nueva consulta antes de 2021.

Banderas escocesas en la marcha de Glasgow. (Andy BUCHANAN / AFP)
Banderas escocesas en la marcha de Glasgow. (Andy BUCHANAN / AFP)

En un ambiente festivo, al grito de «Conservadores fuera» e «Independencia ya», miles de personas se han manifestado por las calles de Glasgow para demandar la convocatoria de un segundo referéndum de independencia, lo que la ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, se ha comprometido a hacer antes del final de la legislatura, previsto para el año 2021.

En declaraciones a Efe, Manny Singh, organizador de la marcha, ha dado la bienvenida al anuncio de Sturgeon, pero ha considerado que, para convencer a los indecisos, el Ejecutivo debe presentar un «plan viable».

«Es el momento, solo necesitamos una fecha. Lo que tiene que hacer el Gobierno es presentar ante los escoceses un plan viable sobre agricultura, economía, moneda... Necesitamos una visión para Escocia», ha afirmado Singh, quien ha asegurado que, una vez haya esa cita en el calendario, el apoyo a la independencia se «doblará o triplicará».

La decisión de reabrir la campaña, indicó Sturgeon el pasado 24 de abril, parte del hecho de que Reino Unido abandonará la Unión Europea (UE), previsiblemente el próximo 31 de octubre, en contra de la voluntad del 62% de escoceses que rechazó el Brexit.

«Tenemos derecho a votar de nuevo»

Es el caso de Allan Galloway, quien, vestido con el tradicional kilt y rodeado de un mar de banderas escocesas, ha indicado que «votamos a favor de quedarnos en Europa y se ha demostrado que nuestra voz no es escuchada en Londres. No tienen derecho a decirnos ‘no’, tenemos derecho a votar de nuevo».

Sin duda, el de Sturgeon era un anuncio que el movimiento independentista esperaba con entusiasmo desde que se conoció la victoria del Brexit en 2016.

En 2014, los ciudadanos fueron preguntados sobre la independencia en una consulta que se saldó con el 55% en contra de la separación, un argumento que el Gobierno británico esgrime para justificar su negativa a que se repita este escenario. En ese resultado tuvo un gran peso la posibilidad de que la independencia dejara a Escocia fuera del bloque comunitario al que pertenecía Reino Unido y que, entonces, no contemplaba abandonar.

Hoy ha concluido en Aberdeen el congreso de primavera del Partido Conservador escocés, en el que su líder, Ruth Davidson, se ha comprometido a trabajar para que no haya un segundo plebiscito.

«Hago una firme promesa ahora: si soy elegida la próxima ministra principal de Escocia, no habrá más juegos constitucionales ni más referendos», ha declarado Davidson, a quien algunos señalan como una posible sustituta de la primera ministra británica, Theresa May, aunque ella ha descartado dar el salto al escenario estatal.