Natxo MATXIN

Osasuna busca mantener la tensión competitiva en el Villamarín, con muchas bajas ofensivas

Tras mantenerse invicto en las últimas cuatro jornadas –tres victorias y un empate–, Osasuna quiere mantener la tensión competitiva ante el Betis, pero deberá hacer frente a un buen número de bajas en ataque. Rubén García, Enric Gallego y Marc Cardona, además de Unai García, han quedado fuera de la convocatoria.

Arrasate quiere que su equipo siga siendo competitivo en las cuatro jornadas que restan para el final de la temporada. (Jon URBE/FOKU)
Arrasate quiere que su equipo siga siendo competitivo en las cuatro jornadas que restan para el final de la temporada. (Jon URBE/FOKU)

Osasuna no quiere bajarse de la buena ola que le ha permitido encadenar tres triunfos y un empate en sus últimos compromisos, de ahí que aspira a seguir manteniendo dicha racha positiva en el Villamarín, aunque con importantes ausencias ofensivas, que hacen todavía más complicada la empresa.

Rubén García, Enric Gallego y Marc Cardona, a los que hay que sumar a Unai García, no serán de la partida, todos ellos aquejados de diferentes problemas físicos, muy ligados al importante trote competitivo que están teniendo que soportar las plantillas en este intenso final liguero.

«Está esperando a las pruebas definitivas, pero Cardona parece que tiene una roturita fibrilar, por lo que es muy difícil que vuelva a jugar, mientras que Rubén y Enric siguen con molestias y Unai arrastra un golpe en el tímpano desde el día del Atlético», ha desgranado el técnico rojillo, Jagoba Arrasate.

Se verá obligado, así, a tirar de alternativas, si bien, como él mismo ha especificado, «disponemos de futbolistas polivalentes que también pueden jugar en posiciones más adelantadas y laterales con proyección ofensiva».

Quién sabe si lo mismo es también una buena oportunidad para ver caras nuevas: Aimar Oroz, Javi Martínez y Hualde están en la lista de elegidos para desplazarse a Sevilla. «Si entendemos que nos pueden ayudar, tiraremos de ellos», ha apuntado.

Un encuentro en el que la escuadra navarra no solo se enfrentará a un rival que no está cumpliendo con las expectativas deportivas acordes a su presupuesto económico, sino que también deberá aclimitarse al intenso calor que le aguarda, pese a haberse retrasado una hora el inicio del choque.

Se prevé que el mercurio supere los 30 grados, «una barbaridad, a esa hora ni los runners salen a correr», ha asegurado medio en broma medio en serio el preparador de Berriatua. «Habrá que hidratarse bien y medir los esfuerzos, pero está claro que las condiciones van a ser todavía más complicadas», ha criticado.

Un Betis sin estar salvado todavía

Además, espera a un Betis enrabietado por no responder a las expectativas y que todavía no ha obtenido la salvación matemática. «Tiene grandísimos jugadores, a los que, si les dejamos jugar, nos pueden hacer mucho daño. Disponen de mucho talento, que puede jugar por dentro, fuera y con gol. Tendremos que estar defensivamente como en los dos últimos encuentros», ha analizado.

A seis puntos de posiciones europeas, con doce todavía en juego, a Arrasate no le hace mucha gracia hablar de ese objetivo. «Ese tren nunca ha existido, ni hemos hablado de ello. Lo que más me interesa ahora mismo es que sigamos siendo reconocibles porque el equipo, aunque ha sufrido muchos cambios, sigue siendo muy competitivo y eso es una buena noticia para el entrenador», ha concluido.