La telúrica Tina Turner figura como una de las cantantes más solventes de la historia; a lo largo de seis décadas ha vendido más de 100 millones de copias de álbumes. Diez álbumes de estudio, dos en directo, dos bandas sonoras y media decena de recopilatorios cuyos derechos han pasado a formar parte del gigante BMG por un precio que todavía no ha sido revelado.

Este acuerdo implica que BMG será un socio de todos los derechos musicales de Tina Turner e incluye sus grabaciones, su actividad como compositora, su nombre e imagen, entre otros. No obstante, Warner Music seguirá siendo su compañía discográfica.

A través de un comunicado, Hartwig Masuch, CEO de BMG, ha señalado que «el viaje musical de Tina Turner ha inspirado a cientos de millones de personas en todo el mundo y continúa llegando a nuevas audiencias. Es un honor para nosotros asumir el trabajo de gestionar los intereses comerciales y musicales de Tina Turner. Es una responsabilidad que nos tomamos en serio y seguiremos con diligencia».

De esta manera, la cantante, que ha ganado doce premios Grammy a lo largo de su carrera, se suma a la gran lista de cantantes que en los últimos años ha vendido los derechos de su legado musical.

BMG representa o posee derechos sobre el trabajo de otros artistas icónicos como Mick Jagger, Keith Richards, John Lennon, Ringo Starr, Mick Fleetwood, Roger Waters, Kurt Cobain, Blondie, David Bowie o Iron Maiden. El caso más sonado fue el de Bob Dylan, quien el año pasado vendió a Universal Music los derechos de su obra –más de 600 canciones– por 300 millones de dólares el año pasado, el acuerdo más alto de la historia.

‘Tina’, un documental que reflejó su dura existencia

Hace varios meses se estrenó a través de HBO el documental ‘Tina’, último capítulo en la larga confrontación de Tina Turner con su vida, desde su condición de mujer incombustible, pero al mismo tiempo vulnerable, siendo víctima del maltratador Ike, su excompañero sentimental.

Rodado por Dan Lindsay y T.J. Martin, el filme responde al esquema clásico de todo documental sobre una estrella, aunque con cierto carácter de alegato contra la violencia machista.

Tina fue una explosiva e idolatrada reina del soul y el rock. Sobre el escenario siempre demostró una imparable fuerza telúrica, pero al mismo tiempo y en cuanto los focos se apagaban, se transformaba en una mujer con miedo y a merced de un hombre posesivo y violento. Ike Turner (fallecido en 2007) aportó su apellido y fue su plataforma a la fama. A cambio, convirtió su vida privada en un infierno de violencia.

El documental repasa la larga secuencia de éxitos de la cantante, las cifras multimillonarias de ventas y los sucesivos problemas privados. Desde la infancia sumida en la pobreza de la niña que fue, llamada entonces Anna Maer Bullock, hasta el abandono de sus padres. Los orígenes de su carrera musical están ligados a Ike, al que conoció en 1958.

Su primera confesión sobre los maltratos de Ike apareció en los 80 en forma de un artículo publicado en la revista ‘People’.

Ante la cámara, Tina revela que en su día le costó mucho decidirse a hablar de los maltratos a los que estaba siendo sometida.

Siguiendo los cánones del género, el documental alterna imágenes de archivo de sus actuaciones más legendarias con material inédito y entrevistas, entre las cuales figuran las aportaciones de algunos colegas y compañeros del pasado, como Angela Basset y Oprah Winfrey, así como de su actual compañero sentimental, con el que comparte su existencia otoñal junto a un lago suizo.

La cantante afroamericana ha revelado sus pasajes vitales en propuestas literarias como ‘Yo, Tina’, en 1986; la película ‘Tina, Whats Love Got to Do with It’, de 1993. Y también un musical titulado ‘The Tina Turner Musical’, en 2018.