IKER FIDALGO ALDAY
PANORAMIKA

Visibilizar

Una de las labores que consideramos imprescindibles en el espacio reservado para estas líneas es la visibilización de las diferentes acepciones que abarca la creación contemporánea. A pesar de escribir desde una óptica que toma como sistema de referencia el arte contemporáneo, son varias las ocasiones en las que derivamos hacia caminos paralelos no estrictamente regidos bajo los espacios normativos del arte, pero que dan forma al panorama cultural actual y desempeñan un papel ineludible en la producción visual de nuestra sociedad. Por todo esto, reivindicamos desde estas reseñas la relevancia de campos como el cómic, la ilustración, el arte urbano o el diseño, que cada vez más demuestran su fortaleza en espacios antes impenetrables. La lectura de estas disciplinas debe ser lo suficientemente abierta como para comprender que su labor en la construcción de imágenes que componen nuestro entorno es tan relevante que ha sabido calar en la cultura de masas de una manera tremendamente influyente. Asimismo, el sistema del arte se ha visto capaz de incluir entre sus espacios legitimados creaciones y tendencias que remueven los límites que antes parecían imposibles de sobrepasar.

A este respecto, el espacio bilbaíno SC Gallery dedica hasta el 21 de julio una exposición individual a Sergio Hidalgo (Barcelona, 1975). Iniciado en el mundo del graffiti a finales de los años 80, el artista también conocido como Sixe Paredes es un caso de evolución creativa que avanza hasta llegar a un trabajo capaz de combinar lo pictórico con lo escultórico y la instalación. Un total de diez pinturas sobre tela y papel y una pieza escultórica conforman “Naturaleza Abstracta”, en donde la abstracción nos permite identificar texturas, geometrías y composiciones cromáticas que en ocasiones parecen acercarse al diseño gráfico pero sin abandonar reminiscencias urbanas y elementos repetitivos. La superposición de colores planos y un trazo prácticamente ausente de gestualidad manual nos conducen hacia unos códigos propios del mundo digital. Por otro lado, podemos advertir una serie de ingredientes que dan forma a un estilo propio y sobre todo a un universo simbólico para nada improvisado que acaba asentándose como un denominador común de toda su pintura, a medio camino entre la presencia de la naturaleza y un caos ordenado. Un interesante perfil el de Paredes que aparece en Bilbo con motivo del noveno aniversario de esta galería especializada en street art y graffiti.

Por otro lado, el Gazteleku Martindozenea de Irun vuelve a ser protagonista gracias al programa expositivo que viene coordinando en los últimos meses, dedicado en su mayoría a la ilustración y a la difusión del trabajo gráfico. El pasado 2 de junio inauguró una muestra de la ilustradora residente en Biarritz Little Madi (Antibes, 1987), que estará disponible hasta el 9 de julio. Un estilo muy identificable y de inevitable atracción desde un primer vistazo esconde delicados detalles desde los que subyace un alegato por el trabajo manual, la delicadeza del trazo y la composición lenta pero certera. Varios de sus últimos trabajos así como una serie de serigrafías realizadas durante el pasado año, conforman el grueso de esta nueva propuesta del Gazteleku Martindozenea.