Los fabricantes de automóviles chinos se han propuesto recuperar algunas de las marcas históricas españolas. Primero lo hicieron con Ebro, cuyos nuevos modelos ya están en el mercado, y ahora lo hacen con Santana, la fábrica de Jaén de cuyas instalaciones salieron los míticos Land Rover y de donde ahora saldrá una pickup con motores diésel e híbrido.