Stephen Curry honra el adiós de Ray Allen

La estrella de los Warriors, eclipsada hasta ahora por Durant, reventó el dueloante los Portland Trailblazers anotanto 23 de sus 28 puntos en un cuarto.

Cuando en las Finales de 2013, el MVP se lo llevó LeBron James, nadie opuso objeción alguna, pero tampoco pudo negar nadie que fue Ray Allen quien «salvó» a los de Florida en el sexto partido. Un triple suyo a cinco segundos del final provocó la prórroga por la cual los Heat lograron forzar el desempate y, por ende, llevarse aquel anillo. Un año después, cuando los San Antonio Spurs se tomaron la revancha, la imagen de la Final también tuvo a Ray Allen entre sus protagonistas. El escolta trataba de impedir la transición de un Manu Ginóbili que se libró de él de un empellón antes de machacar en la cara de Chris Bosh.

Los grandes jugadores se pueden encontrar en las grandes citas, y eso se puede decir de Ray Allen, un día después de que, a los 41 años, decidiera colgar las botas. Y otro tanto se puede decir de Stephen Curry. La estrella de los Warriors, eclipsado su aura por la llegada de Kevin Durant a la franquicia de Oakland, recuperó su fulgor en uno de los duelos más esperados de este principio de campaña. Los californianos se llevaron el partido por 104-127 ante los Portland Trailblazers, y aunque Damian Lillard, con 31 puntos, anotó más que el base de los Warriors –«solo» 28–, fue Curry quien brilló y decidió.

11 puntos en dos minutos

Klay Thompson, Kevin Durant y Curry en el mismo equipo... muchos potenciales tiradores como para decidirse por uno sin que el juego colectivo se resienta. Pero frente a los Blazers Curry encontró su sitio. Fue en el tercer cuarto, cuando encadenó 11 puntos en dos minutos, para agrandar su hoja estadística en unos 12 minutos de fábula.

En total, 23 de sus 28 puntos entraron en ese tercer parcial, un 20-41 con el que los Warriors rompían el partido, después de que el escolta reserva Ian Clark supliera el mal día de Klay Thompson con 22 puntos, más los 20 de Durant.

Los Warriors empiezan a carburar y los Spurs ya saben lo que es perder. Contra todo pronóstico, los Utah Jazz les hicieron porder el polvo, 91-106, gracias a los 22 puntos del ex de los Spurs George Hill.