Aru supera al Sky como solo Nibali logró desde el inicio de su dominio

El sardo atacó a tres kilómetros del primer final en alto y llegó a meta con veinte segundos sobre Froome, nuevo líder, y Porte.

Fabio Aru logró ayer su primera victoria en el Tour en La Planche des Belles Filles, que hizo recordar la de Vincenzo Nibali en esa cima en 2014, también con el maillot de campeón italiano de Astana. Con su exhibición se cuela entre los favoritos de una carrera que ya lidera Chris Froome, que no pudo descolgar a sus rivales como es habitual en la primera etapa de montaña de los Tours que ha ganado.

La Planche des Belles Filles no es un puerto para marcar grandes diferencias, pero Aru y Dan Martin llegaron por delante y otros nueve corredores a veinte segundos a pesar de que el BMC quiso endurecer la etapa, que tuvo un promedio de 43 por hora, y que el Sky siguió su labor de desgaste en la subida final.

Ni el equipo inglés ni su líder estuvieron tan fuertes como es habitual. Kwiatkowski hizo la primera selección y aguantaban seis Sky en cabeza, pero solo Nieve y Thomas pudieron trabajar para su líder. Cuando atacó Aru a 2,4 kilómetros de la llegada, no respondieron los líderes y el navarro siguió su labor hasta que se apartó con otro ataque de Simon Yates a 1,9 al que respondió Thomas porque Henao y Landa ya se habían descolgado sin poder llegar a trabajar.

El galés apenas trabajó cien metros y atacó Froome y pudieron seguirle Martin, Porte, Aru, Bardet y Yates, demasiados corredores para lo que es habitual cuando arranca su moto. Frenó y permitió la llegada de Contador y Quintana, que se habían quedado descolgados. Ni Froome ni Sky dieron el nivel al que acostumbran desde que empezó su dominio en el Tour en ese mismo puerto hace cinco años y Aru hizo recordar al único que pudo derrotar al equipo inglés.

Se había marcado el objetivo del Giro del Centenario, pero una lesión de rodilla por una caída mientras se entrenaba en Sierra Nevada le hizo cambiar el calendario y empezar a pensar en el Tour. Estuvo tres meses sin competir desde la Tirreno hasta Dauphiné y en la carrera alpina ya fue quinto y se exhibió en el campeonato italiano como hizo Nibali antes de ganar el Tour. Llega más fresco que nadie y su exhibición de ayer y que solo haya una crono final le hace colocarse entre los principales favoritos junto a Froome y Porte.

Sin Cavendish ni Sagan

Hasta la subida final los protagonistas de la etapa fueron Cavendish y Sagan por su ausencia. Se confirmó que el manés tenía una fractura del omóplato del hombro derecho y Sagan se despidió en una rueda de prensa sin compartir su expulsión del Tour por provocar su caída.

De Gendt (Lotto), Voeckler (Direct Energie), Perichon (Fortuneo), Van Baarle (Cannondale), Gilbert (Quick Step), Bakelants (Ag2r), Delage (FDJ) y Boasson Hagen (Dimension Data) protagonizaron la fuga, que no tuvo permiso del BMC, y los últimos supervivientes, Gilbert y Bakelants, fueron atrapados antes de llegar a la subida final.

El Giro pasa factura a Nairo Quintana

El primer final en alto del Tour sirvió para confirmar la dificultad de enlazar Giro y Tour para corredores que aspiran a la general. Nairo Quintana quiso desafiar a esa lógica y presentó como argumento su victoria en la Vuelta del año pasado con menos tiempo de recuperación tras acabar en el podio el Tour, pero los corredores que disputan los primeros puestos en la ronda francesa han realizado una preparación muy específica y ésa es una ventaja que ayer quedó en evidencia en el final en alto.

A pesar de que el colombiano es muy regular y sin estar bien es capaz de llegar con los mejores, solo pudo ser noveno ayer. Mikel Landa se desgastó menos en el Giro al no disputar la general, pero tampoco pudo estar a su nivel y, aunque entró como tercer Sky el decimoquinto y fue el mejor vasco, no pudo trabajar para Froome como hizo Nieve. Bauke Mollema llegó el 32º, Rolland el 37º y Pinot el 52º para confirmar que no se pueden disputar a un nivel similar Giro y Tour como pretende Nairo Quintana.

Pese a todo el colombiano del Movistar confía en mejorar su nivel en el transcurso del Tour porque se presentó en Düsseldorf sin ningún día de competición desde el final del Giro. Tendrá ahora dos jornadas llanas para los sprinters antes de afrontar dos etapas del fin de semana con puertos más duros que el de ayer. J.I.