20 NOV. 2021 Protesta de agricultores contra la reforma de la PAC en Bruselas Agricultores y organizaciones agrarias se manifestaron ayer en Bruselas en contra de la reforma de la Política Agraria Comunitaria que el Parlamento Europeo prevé votar la próxima semana. «La PAC son 400.000 millones de euros, un tercio del presupuesto de la Unión Europea. Con eso podríamos cambiar las cosas», aseguraron. GARA BRUSELAS Pancartas llamando a votar contra la PAC y a retirar la reforma que está a punto de votarse en la Eurocámara dejaban bien a las claras el motivo de la manifestación celebrada ayer en Bruselas. Agricultores y representantes de organizaciones agrarias se movilizaron en la plaza de Luxemburgo, junto a la sede del Parlamento Europeo, en contra de la reforma de la Política Agraria Comunitaria (PAC) y del vicepresidente comunitario para el Pacto Verde, Frans Timmermans. «No hay que votar esta PAC. Hay que hacer otra PAC para responder a los retos», señaló Sabine Renteux, representante del Movimiento de Acción Campesina, después de que se asegurara que esta política agrícola es «totalmente incoherente con el Pacto Verde». La reforma de la PAC, que se votará la próxima semana, contempla, entre otras actuaciones, destinar el 25% de los pagos directos a productores que desarrollen prácticas beneficiosas para el medio ambiente, así como la introducción de «ecoesquemas», medidas complementarias que puede adoptar el agricultor más allá de las requeridas. Quienes reciban fondos deberán destinar el 3% de las tierras cultivables a biodiversidad y los estados estarán obligados a recoger en sus planes estratégicos una redistribución de los fondos para destinar un 10% del presupuesto a pequeñas explotaciones. En lugar de facilitar «una transición agroecológica, que permita una alimentación más sana y preservar la biodiversidad y el clima», la UE ha optado por impulsar un modelo de agricultura que «piensa en las exportaciones, que contamina y que aplasta a los pequeños productores», añadió Renteux en declaraciones a Efe. «La PAC son 400.000 millones de euros, un tercio del presupuesto de la UE. Con eso podríamos cambiar las cosas», subrayó. Sobre los puntos concretos de la futura política agrícola que menos gustan, manifestó que la UE no debería financiar a los agricultores en función de la extensión de sus tierras, algo que "conlleva la concentración de granjas y la destrucción de la agricultura familiar». En su lugar, abogó por primas al empleo y a una agricultura de calidad, donde «las ayudas sean distribuida de manera más justa, que tenga en cuenta a los pequeños y que no financie las tecnologías», precisó.