30 ENE. 2025 GUARDIAN LUCHA POR SU FUTURO «Nos han abandonado», critica el comité tras el aval de Lakua al apagado Guardian inició ayer el proceso de apagado del horno de Laudio tras recibir el aval de los técnicos del Gobierno de Lakua y de Osalan. La plantilla criticó la decisión y la falta de apoyo institucional y seguirá movilizándose, aunque desconvocó la huelga prevista para hoy. «Nadie ha dicho que no, por lo que los trabajadores quedan totalmente abandonados a su suerte», lamentaron. Concentración en el acceso a la planta de Guardian Glass en Laudio. (Raúl BOGAJO | FOKU) Nerea GOTI LAUDIO Guardian inició finalmente ayer el proceso de apagado del horno de la planta de Laudio, con el visto bueno de los técnicos de Industria y de Osalan, según informaron desde el comité de empresa, que advirtió de que dejar sin actividad el horno es un paso «irreversible» para la continuidad de la actividad de la planta. «No ha habido ninguna oposición [al apagado del horno] por parte de ninguna institución, ni Osalan, ni Industria. Simplemente se han informado sobre lo que Guardian va a hacer», manifestó Iker Olazabal, responsable de ELA en Aiaraldea. Según indicó, «el horno queda inutilizado y nadie ha dicho que no, por lo que los trabajadores quedan totalmente abandonados a su suerte. Y encima les han pedido colaboración». Tal y como destacó, «afortunadamente los trabajadores tienen bastante más dignidad y se han negado a participar en el proceso de apagado». El representante de ELA recordó que la multinacional estadounidense intentó iniciar la parada «con personal de fuera llegado de madrugada», lo que le llevó a cuestionar por qué hay que «esconder a quien viene a parar el horno», mientras dirección y Gobierno de Lakua hablan de un «apagado controlado». Dudó, asimismo, de que existiera un acuerdo con la empresa y el alcance del mismo y avanzó que las movilizaciones «señalarán a Guardian, pero también la dejadez de las instituciones». El problema, remarcaron desde ELA y LAB, es que la empresa «presentará un expediente de extinción», que afecta directamente a 171 trabajadores. A este respecto, Maddalen Muguruza, responsable de Industria de LAB, destacó la importancia de la movilización ciudadana en defensa de los puestos de trabajo y en contra del proceso de desindustrialización que padece la comarca. Tras agradecer el apoyo recibido en la concentración frente a la planta desde las 05.00, recordó la manifestación convocada para mañana a la tarde en Laudio. SIN LA PRESENCIA DE INDUSTRIA La orden de apagar el horno la dio la dirección sobre las 07.00 sin esperar a los técnicos de Industria, de Osalan y a los inspectores de Medio Ambiente, a pesar de que se había acordado así en la reunión que mantuvieron el martes por la tarde la multinacional y los representantes institucionales. Tras la llegada de los técnicos, el proceso se paralizó durante un tiempo mientras los representantes del comité, de la dirección y los expertos mantenían un encuentro. Al lugar también se desplazó el viceconsejero de Industria, Andoitz Korta. Según lo que les fueron transmitiendo desde el interior vía WhatsApp, la dirección explicó en esa reunión los aspectos técnicos para la parada «controlada» del horno. El comité intentó que no se produjera, en tanto no hubiera sobre la mesa una solución que dé continuidad a la empresa. Olazabal explicó la «confusión» reinante en torno al acuerdo anunciado la víspera de un «apagado controlado». Detalló que estaba previsto que los técnicos del Gobierno y de Osalan llegasen entre las 08.00 y las 09.00 a la planta. Sin embargo, la dirección de la multinacional ordenó el inicio del apagado antes de su llegada, a las 07.00, razón por la que los trabajadores se negaron a iniciarlo. ELA y LAB calificaron la decisión de la empresa de «gravísima». Según indicó el sindicalista de ELA, Guardian «habla de una forma [de apagado] controlada, pero no es verdad, es una forma de dejar inútil el horno y lo que queremos es que Industria entienda que esa forma de parar supone inutilizar el horno, independientemente de lo que diga Guardian». «Se quiere apagar con todo el contenido dentro, con más de metro y medio de vidrio líquido dentro y eso hace inservible el horno», aseguró. Representantes de ELA y LAB criticaron también que el Ejecutivo de Lakua emplazara a la plantilla a aceptar el apagado del horno, lo que tildaron de «irresponsabilidad». Mikel Etxebarria (ELA) apuntó que el anuncio del cierre llegaba poco después de que la dirección asegurase que tenía el aval de EEUU para negociar el convenio. «Y de repente nos encontramos con una aparente avería de la que no han informado ni al comité de empresa ni a los delegados de prevención». «Una aparente avería desde octubre de la que no hay ningún informe técnico que señale la irreversibilidad del horno y, sin embargo, se ha tomado esta decisión», lamentó. Tanto Etxebarria como Muguruza exigieron que se detenga el proceso de apagado y pidieron a Lakua que intervenga ante lo que consideran un incumplimiento de las medidas anunciadas y paralice el enfriamiento del horno. DESCONVOCADA LA HUELGA, MANIFESTACIÓN MAÑANA Finalmente, la empresa contó con el aval de los técnicos de Lakua y de Osalan y retomó el apagado del horno, una decisión que censuraron los representantes de ELA y LAB, que se mostraron muy críticos con las instituciones por «dejar sola» a la plantilla y no poner en entredicho la decisión de Guardian. El comité desconvocó la huelga que tenía previsto iniciar hoy, aunque seguirán movilizándose. Así, recordaron la manifestación convocada para mañana en Laudio. «Seguiremos movilizándonos en defensa de los puestos de trabajo y en contra de la desindustrialización de la comarca», manifestó Maddalen Muguruza, quien agradeció asimismo el apoyo recibido por parte de otros agentes. CONCENTRACIÓN DESDE LAS 05.00 Más de un centenar de personas permanecieron concentradas desde las 05.00 a las puertas de Guardian, para apoyar a la plantilla ante el anuncio de cierre, que conlleva la destrucción de 171 empleos directos, convocadas por el comité de empresa y Aiaraldeko Greba Batzordea, plataforma muy activa en los últimos años en defensa del empleo y de los servicios públicos en la comarca, que reúne entre otros agentes, a personas del movimiento feminista y de pensionistas, además de sindicatos. La Ertzaintza desplegó un amplio dispositivo. A la concentración se sumó la alcaldesa de Laudio, Ainize Gastaka, además de trabajadores de otras plantas de la zona. UN INVERSOR DE FUERA, INTERESADO Gastaka explicó que en la reunión del martes entre la multinacional y Lakua también participó el Ayuntamiento, que solicitó que en el apagado del horno también estuviera presente el delegado de prevención de la fábrica, una petición que, según dijo, fue aceptada. En declaraciones a Euskadi Irratia, la primera edil explicó que el horno es «el que marca el futuro» de la planta, con tres posibilidades: la primera, mantenerlo en caliente, lo que posibilitaría una mayor capacidad de negociación, una situación similar a la que se dio en 2012. En esta situación, anunció que ya hay un inversor que ha mostrado su interés para iniciar negociaciones. La segunda posibilidad sería el apagado controlado del horno, acordado por Guardian y Lakua; en este caso se necesitaría una mayor inversión y más tiempo para ponerlo en marcha en caso de que alguien se interesara. La tercera sería apagar el horno «de una forma no adecuada», lo que le haría perder su valor y no podría continuar con su actividad. A su juicio, «hay riesgo» de que ocurra eso. GASTAKA: SE NECESITA MÁS INVERSIÓN Gastaka especificó que el inversor que ha mostrado interés es «de fuera», que ya ha habido contactos y que de iniciarse una negociación se podría dar una salida a la fábrica y a la plantilla. Recordó que con Guardian se está repitiendo el mismo proceso que con Glavista, con la paralización de su actividad y el despido de 240 trabajadores. «Ahora entramos en una segunda fase, con el cierre de Guardian, en este caso con la pérdida de 171 empleos y también su actividad». En ese sentido, Ainize Gastaka denunció que «estamos ante un proceso de desindustrialización, que perjudica mucho tanto a Laudio como a la comarca entera. Todavía se ha invertido muy poco en la comarca, está claro que no es suficiente y que necesitaremos más ante este nuevo golpe que hemos recibido». El lehendakari, Imanol Pradales, afirmó que la prioridad de Lakua es encontrar un nuevo socio industrial que pueda mantener la actividad. «Esa debe ser y va a ser nuestra prioridad. Nuestra prioridad debe ser cómo encontrar de nuevo un socio industrial, otro empresario industrial, recuperar el tejido industrial en la comarca de Aiaraldea y dar una nueva vida a Guardian Llodio», manifestó. El Gobierno mantiene contactos con varios inversores interesados en adquirir la planta de Guardian Glass en Laudio tras la decisión de esta multinacional de cerrarla. La empresa inició, según fuentes de Lakua, el apagado controlado del horno de la fábrica a través de un proceso que «asegura la integridad y seguridad» de este elemento de la planta. Desde el Ejecutivo autonómico se afirmó que «este nivel de integridad posibilitará la entrada de nuevos proyectos industriales» interesados en esta instalación. Desde el Ejecutivo se recordó que en la reunión mantenida el pasado martes con la multinacional, se acordó que el Gobierno «lidere la interlocución» con los inversores interesados en la fábrica. INFORMADOS«No ha habido ninguna oposición por parte de ninguna institución, ni Osalan, ni Industria. Simplemente se han informado» INVERSIÓN«Estamos ante un proceso de desindustrialización, que perjudica mucho tanto a Laudio como a la comarca entera. Todavía se ha invertido muy poco»