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LIGA F

Paso hacia la permanencia a costa de la ilusión rojiblanca

Un gol de Elba a los tres minutos de partido y la excelencia defensiva de su equipo da al Eibar el tercer triunfo a domicilio consecutivo y le acerca a su objetivo. El tropiezo aleja al Athletic de la tercera plaza, ahora a tres puntos.

Amani intenta arrebatar el balón a Jone Amezaga. (Oskar MATXIN-EDESA | FOKU)

El Eibar les coge gusto a las sorpresas, aunque ya no lo son tanto. Dos semanas después de asaltar Valdebebas, conquistó Lezama en un partido en el que tampoco partía precisamente como favorito.

Como la temporada pasada, viene de menos a más. Le costó en otoño, pero ha encontrado ya la manera de blindarse, enterrando los errores defensivos que tantos puntos le costaron, y ha enlazado tres partidos con la portería a cero, con lo que ha rentabilizado su eficacia ante la portería rival: como ante el Real Madrid, un solo disparo entre los tres palos le dio ayer tres puntos.

No fueron muchos más por parte local (12 remates en el total del partido, pero solo tres entre los tres palos), porque al Athletic le costó horrores convertir su abrumadora posesión en juego efectivo ante un rival que se siente cómodo sin pelota. Solo Clara Pinedo, esporádicamente, lo logró en el primer tiempo. En el segundo, las vizcainas dieron un paso adelante, su fondo de armario les permitió después minimizar los efectos del cansancio acumulado y el partido se jugó más cerca de la portería armera. Pero el Eibar se defendió con tanta fortaleza dentro del área como lo había hecho en el resto del campo, y aunque sufrió considerablemente en una recta final en la que el Athletic se lanzó con todo a por el gol, acabó con su portería impoluta y sin que Miralles tuviera que realizar intervenciones de mérito.

Tuvo el Eibar la fortuna y el mérito de marcar en su primera ocasión. Van Deursen estrelló un chut en el palo y Elba, atenta, cazó el rechace en el área para batir a Nanclares.

Imposible imaginar un escenario mejor para las armeras y peor para el Athletic, que tiró de pico y pala, pero no llegó al oro. Solo Clara Pinedo encontró alguna pepita, bien forzando un par de córners dentro del área, bien con sus balones al espacio -milimétricos, porque su rival no concedía nada-, que sus compañeras no pudieron aprovechar.

El puntito extra de intensidad con el que regresó el equipo rojiblanco de vestuarios se notó en una segunda parte que se jugó más cerca del área visitante, aunque el Eibar consiguió casi siempre que no pasara nada verdaderamente reseñable. La ofensiva local arreció en los últimos minutos, pero las dos mejores ocasiones, de Azkona y Elexpuru, tampoco pudieron impedir que los puntos se quedaran en el bolsillo del equipo armero, que tiene un colchón de siete sobre el descenso. El Athletic se aleja ahora a tres de la Real, que se queda con el tercer puesto, y uno del Atlético.