12 JUN. 2025 JOPUNTUA Creencias y responsabilidad Txoli MATEOS Socióloga Hace ya un siglo que el sociólogo alemán Max Weber realizó una famosa distinción entre los dos tipos de ética que pueden primar en la acción política: la ética de las creencias y la ética de la responsabilidad. Se supone que la persona que se guía por la ética de las creencias (o de las convicciones) antepone sus valores a todo lo demás, mientras que la que actúa según la ética de la responsabilidad se preocupa sobre todo de las consecuencias de sus decisiones y relativiza, por tanto, sus valores. Es evidente que las situaciones a las que nos enfrentamos a lo largo de la vida son lo suficientemente complejas como para que resulte muy difícil decidir a qué tipo de ética deberíamos adherirnos. El mismo Weber se encarga de advertir, como liberal que era, que nadie puede decirnos en qué momento debemos actuar según un tipo u otro de ética. Y, de hecho, las dos se pueden utilizar perversamente. En nombre de la responsabilidad, literalmente dicho, Aznar defendió colaborar en el despropósito de la invasión de Irak. Y en nombre de las creencias supuestamente cristianas y de los valores supuestamente europeos, Polonia cierra cruelmente sus fronteras a la inmigración. Aun así, antes de hacer una determinada propuesta, estaría bien pararnos a pensar estas dos preguntas: ¿A qué creencias responde? ¿Qué consecuencias acarrea? Porque podemos estar de acuerdo con los valores de partida y en desacuerdo con la previsión de las consecuencias. Avanzar en el debate sobre la transición ecológica y el papel de las energías renovables, por ejemplo, debería ser el resultado de la conjunción de estas dos éticas. Hablamos de la defensa de creencias como es el respeto a la biodiversidad, pero también somos conscientes de que la industria consume el 60% de la energía... y no queremos una sociedad empobrecida. Es un debate complejo y poliédrico. Pero creo que argumentar valores, totalmente respetables, haciendo caso omiso de lo que pueda suceder en el futuro, es una irresponsabilidad. Hablamos de la defensa de creencias como es el respeto a la biodiversidad, pero también somos conscientes de que la industria consume el 60% de la energía