GARA Euskal Herriko egunkaria
EUROLIGA 2025/26

Saski Baskonia tiene mucho que mejorar, pero mucho que ofrecer

Los gasteiztarras empezaron cayendo por 4-19, pero reaccionaron, con Luwawu-Cabarrot y Diallo como principales anotadores y mucha aportación colectiva. Por desgracia, las estrellas de Olympiacos aparecieron en los momentos clave para decidir el duelo.

Luwawu-Cabarrot tuvo un momento imparable, pero lo sacaron por las faltas. (Endika PORTILLO | FOKU)

No pudo ser, pero como perder ante todo un Olympiacos siempre entra dentro de la ecuación, no es cuestión de llevarse las manos a la cabeza. Después de un arranque desastroso de partido, con un 4-19 en el peor momento, Saski Baskonia fue competitivo y llegó a tener contra las cuerdas a todo un Olympiacos, con 23 puntos de Luwawu-Cabarrot y 15 de Diallo, más un desempeño colectivo lleno de energía en el que las continuas y fulgurantes rotaciones de Paolo Galbiati obligaron a los helenos a exprimir al máximo a sus estrellas.

Fue una pena, sobre todo porque Saski Baskonia llegaba a adelantarse 87-83 enfilando la recta final del duelo, pero entre Evan Fournier, Vezenkov, Tyler Dorsey y Milutinov, Olaympiacos ponía la directa en la recta final y superaba a un Saski Baskonia con mucho por mejorar, pero con mucho por ofrecer. Y para el anecdotario, el precoz debut del esloveno Stefan Joksimovic, con todavía 16 primaveras en su haber.

El arranque fue un bofetón de realidad en toda regla: parcial de 0-10 que obligó a Galbiati a pedir tiempo muerto después de que Olympiacos desarbolase a un Baskonia siempre un paso por detrás, repartiendo sus puntos entre Vezenkov, Dorsey y Milutinov -sumando además tras rebote ofensivo-, mientras que los gasteiztarras sufrían hasta para tirar a canasta, y sin el premio del rebote ni los puntos.

TOMA Y DACA

Clément Frisch, con ocho puntos seguidos, dio el primer empujón real al Baskonia, poniendo el marcador en 12-19 luego de un parcial de 8-0. Ahí empezaba la verdadera Euroliga para Saski Baskonia.

Tras el ala-pívot francés, reaccionaban Howard y Forrest. Otra de las constantes de este primer tiempo fue el constante rotar y rotar del banquillo baskonista, buscando así mantener la famosa frescura de «piernas y sangre» para no perder comba respecto del cuadro heleno. Gracias a ello, Luwawu-Cabarrot y Diallo encontraron el camino para dar otro arreón al Baskonia que pasó de caer por 39-49 al 46-49 con 50 segundos para el descanso. Tiempo muerto del banquillo griego y el Buesa Arena que por fin encontró su temperatura de competición.

Al descanso, el 48-49 con el propio Forrest frenando a Evan Fournier para evitar canastas de última hora. Con lo mal que pintaban las cosas nada más arrancar el duelo...

Toda la segunda mitad fue un toma y daca, con Saski Baskonia llegando a ponerse por delate, incluso 87-83 con un «dos más uno» de Hamidou Diallo, otra de las grandes sorpresas, más los minutos estelares de Luwawu-Cabarrot.

Pero poco duró la alegría en la casa baskonista. Vezenkov y Fournier asomaron en los mejores momentos, amén del 31 de 32 que firmó el cuadro heleno en los tiros libres. Y ante tantos recursos del rival, el Baskonia cedió. Pero mostrando que tiene mucho que ofrecer.