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Lakua deniega el permiso a Statkraft para el parque eólico de Piaspe

En coherencia con el rechazo a la declaración ambiental conocido el pasado agosto, el Ejecutivo de Imanol Pradales ha denegado a la empresa noruega Statkraft la autorización administrativa previa para construir un parque eólico entre Azpeitia, Zestoa y Errezil.

Comparecencia de las organizaciones contra el parque eólico de Piaspe, el pasado agosto. (Jon URBE | FOKU)

El Gobierno de Lakua ha denegado la autorización administrativa previa para el proyecto de parque eólico de Piaspe, previsto en terrenos de los municipios de Azpeitia, Zestoa y Errezil, debido a la existencia de una declaración de impacto ambiental negativa. Esta decisión se conoció en agosto y fue recibida con satisfacción por los colectivos que se oponían al proyecto.

La declaración ambiental sostiene que el proyecto, de cinco aerogeneradores y 33MW de potencia instalada, liderado por la empresa pública noruega Statkraft, no cumple una serie de requisitos para la protección del medio ambiente, por lo que lo considera «ambientalmente inviable, incluso con la aplicación de las medidas preventivas, correctoras y compensatorias contempladas en el estudio de impacto ambiental».

Según publicó ayer el Boletín Oficial del País Vasco, el emplazamiento donde se proyecta el parque Piaspe ocupa «una posición central y próxima con respecto a tres espacios de la Red Natura 2000» en los que existen varias especies de «aves rupícolas y numerosos especies de quirópteros, amenazadas y vulnerables a la actividad de los parques eólicos» por el riesgo de accidentes con los aerogeneradores y la línea eléctrica, que supondrían una barrera a sus desplazamientos.

La declaración ambiental considera, además, que «las medidas propuestas por el promotor no son suficientes para prevenir, corregir o compensar el potencial impacto» en este ámbito y que las que se pudieran articular «no serían proporcionales para poder considerar sostenible el balance entre la producción energética y la afección ambiental».

El documento estima que el proyecto también resulta «ambientalmente inviable» por otras razones como la alta sensibilidad ambiental del entorno; la elevada densidad de territorios de nidificación; la existencia de colonias, dormideros y refugios de fauna voladora amenazada, su «alto riesgo de colisión» y posibles efectos adversos sobre los citados espacios Red Natura 2000.

No obstante, la resolución en la que la Delegación Territorial de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad de Lakua en Gipuzkoa rechaza la autorización no pone fin a la vía administrativa, porque aún es posible interponer un recurso de alzada ante la Dirección de Descarbonización en el plazo de un mes.