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Quiles no logra su performance en Iruñea

Vito Quiles no celebró ayer la charla que tenía previsto en la Universidad de Navarra. El centro supendió las clases desde las 15.00 horas. El agitador de ultraderecha justificó su renuncia en que se habían intervenido 16 armas blancas en un autobús que venía de Bilbo. Delegación del Gobierno lo desmintió. La Policía cargó contra cientos de personas que acudieron a protestar contra el acto.

Incidentes en el campus, pese a la cancelación del acto por parte de Quiles. (Jagoba MANTEROLA | FOKU)

 

El ultraderechista Vito Quiles no celebró finalmente el acto que había anunciado en la Universidad de Navarra. El centro religioso (en el que están matriculadas más de 14.000 personas) anunció por la mañana su decisión de suspender todas las clases desde las 15.00 horas, tres horas antes de la hora que había fijado el agitador político. Quiles, sin embargo, mantenía la cita en la explanda frente a la Facultad de Comunicación.

A las 4.34 horas, el influencer comunicó en redes sociales que el acto se cancelaba. «La Policía ha interceptado a esta hora 16 cuchillos y navajas en un registro aleatorio realizado en Pamplona a dos autobuses procedentes de Bilbao», aseguró.

En su mensaje, también comunicaba que la Jefatura de Policía española se había puesto en contacto con él para indicarle que «no puede garantizar la seguridad del acto ante la amenaza de proetarras y abertzales desplazados del País Vasco a Navarra».

TODO MENTIRA

GARA se puso en contacto con la Delegación del Gobierno que, tras una consulta expresa a la Jefatura de la Policía española, desmintió que se hubieran incautado de esas armas blancas. También negó haberse comunicado con el promotor del acto para decirle que este no podría realizarse. «Nadie se ha puesto en contacto con este señor. Las dos cosas, desmentidas», remarcó.

Además de esto, la Delegación añadió que Quiles no había comunicado formalmente el acto. Si este se desarrollaba dentro de la Facultad, la Delegación no tenía nada que decir. Pero, una vez se encontró con que la Universidad le había cerrado la puerta, este permiso sí era necesario.

Sin embargo, los avisos del agitador ultraderechista habían activado a grupos de izquierda que se oponían a su presencia y que se personaron en el campus. La cita era a las 17.30 horas.

Cientos de jóvenes, muchos de ellos encapuchados desde el inicio, acudieron al campus que había sido acordonado por antidisturbios de la Policía española.

INCIDENTES

Al ver que se les bloqueaba el paso, comenzaron los incidentes. La Policía disparó sus lanzapelotas con cargas de fogueo y los contramanifestantes tumbaron contenedores de vidrio y les arrojaron botellas.

La Policía cargó y fue desa-lojando el campus, empujando a los jóvenes hacia el barrio de Iturrama, donde se sucedieron las carreras y volvieron a escucharse los disparos de los lanzapelotas.

Los incidentes más reseñables tuvieron lugar en las cercanías del frontón López, donde cruzaron varios contendo- res y prendieron fuego al interior de uno, sin causarle desperfectos. Tumbaron otro para hacer acopio de botellas.

Tras los disturbios, había humo y un fuerte picor en los ojos, por lo que la Policía debió emplear algún tipo de gas lacrimógeno.

La Universidad de Navarra, cuya rectora, María Iraburu, había enviado un escrito a todos sus alumnos para que no acudieran al acto, envió al finalizar el día un comunicado para señalar que «los hechos sucedidos esta tarde no se corresponden con los valores que esta institución promueve. Reiteramos que la Universidad es un lugar de convivencia, diálogo y respeto en el que no tiene cabida la violencia».