Rusia rechaza concesiones y defiende a Witkoff tras la filtración de su llamada

La filtración a la prensa de la conversación telefónica del asesor presidencial ruso Yuri Ushakov con el enviado de EEUU, Steve Witkoff, ha venido a enredar aún más la negociación del plan de paz para Ucrania propuesto por Washington. Bloomberg publicó una transcripción de la conversación mantenida el 14 de octubre en la que Witkoff pidió a Ushakov trabajar juntos en un plan de paz para Ucrania y le aconsejaba sobre el modo de convencer al presidente, Donald Trump: «Felicite al presidente por este logro… (dígale) que es un hombre de paz».

La llamada buscaba que Trump negara el suministro de misiles de crucero Tomahawk a Ucrania, según las filtraciones publicadas por la agencia Bloomberg.

La filtración ha encendido las peticiones de destitución de Witkoff al que llegan a acusar de trabajar para Putin. Para el Kremlin, buscan torpedear las negociaciones. «Es probable que las voces que ahora piden la destitución de Witkoff tengan como principal objetivo frenar el tímido impulso hacia el arreglo pacífico», señaló el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.

«Surgirán muchas personas que no se detendrán ante nada para perturbar este proceso», añadió.

El Kremlin no observa «nada particularmente alarmante» en las conversaciones filtradas, pero tampoco descartó su posible falsedad y trató de restarles importancia. «No exageraría la importancia destructiva de estas filtraciones», alegó Peskov.

Por su parte, Ushakov las calificó de «inaceptables» y cuestionó cómo llevar a cabo negociaciones con socios que filtran información, por lo que dijo que volverá a hablar con Witkoff por teléfono para solucionar la cuestión.

El Kremlin espera la próxima semana la visita de Witkoff a Moscú, donde será recibido por Putin.

En cuanto al plan de EEUU que Ucrania y sus aliados de la «coalición de los voluntarios» han modificado eliminando varios puntos fravorables a Moscú, el Gobierno ruso descartó cualquier concesión y aplaudió los «esfuerzos» de Trump para encontrar «soluciones razonables». El viceministro de Exteriores ruso, Sergei Riabkov, sostuvo que «las diversas versiones de este plan son materia de negociación» y que «no puede haber conversaciones sobre concesiones o rendición» por parte de Rusia.

Moscú «está preparado para lograr sus objetivos fijados, preferiblemente a través de medios diplomáticos», advirtió. Riabkov se remitió a los acuerdos alcanzados por Putin y Trump en agosto en Alaska. Insistía así en rechazar el giro de la contraoferta.

Por su parte, Putin cree que EEUU «entiende» la complejidad de la situación, después de que su homólogo bielorruso, Alexander Lukashenko, expresara su deseo de que Washington reconozca que la guerra «es un asunto difícil que requiere decisiones difíciles».

Kallas pide reducir el tamaño y presupuesto del Ejército ruso

La representante de la UE para Asuntos Exteriores, Kaja Kallas, instó ayer a disminuir el tamaño del Ejército ruso y el presupuesto militar de Rusia para evitar que la guerra en Ucrania continúe, frente a un plan de plaz que plantea que Kiev reduzca sus fuerzas armadas. Kallas añadió que si se destina «cerca del 40%» del presupuesto federal al Ejército, como según dijo hace Rusia, «entonces querrás usarlo de nuevo. Eso es una amenaza para todos nosotros». Sobre la propuesta de limitar el Ejército ucraniano, Kallas sostuvo que «no deberíamos caer en la trampa» y recalcó que el foco debería ponerse en las concesiones y limitaciones que se impongan sobre Rusia».

«Aún tenemos que pasar de una situación en la que Rusia finge negociar a una situación en la que necesita negociar. Estamos llegando ahí», aunque en el campo de batalla los avances son del lado ruso. GARA