16 DIC. 2025 SALARIO MÍNIMO PROPIO La mayoría sindical llama a la huelga el 17 de marzo por un SMI propio La mayoría sindical de Euskal Herria -formada por ELA, LAB, Steilas, Hiru y Etxalde- ha convocado una jornada de huelga general para el próximo 17 de marzo a favor de la reivindicación de un salario mínimo interprofesional (SMI) propio ante el bloqueo empresarial e institucional que sufre esta demanda. Movilización en Iruñea por un SMI propio el pasado jueves. (Iñigo URIZ | FOKU) Martxelo DÍAZ IRUÑEA {{^data.noClicksRemaining}} Para leer este artículo regístrate gratis o suscríbete ¿Ya estás registrado o suscrito? Iniciar sesión REGÍSTRARME PARA LEER {{/data.noClicksRemaining}} {{#data.noClicksRemaining}} Se te han agotado los clicks Suscríbete {{/data.noClicksRemaining}} La mayoría sindical de Euskal Herria -formada por ELA, LAB, Steilas, Hiru y Etxalde- ha convocado una jornada de huelga general para el próximo 17 de marzo en Hego Euskal Herria en defensa de la reivindicación de un SMI propio ante el bloqueo de las patronales Confebask y CEN, los gobiernos de Lakua y Nafarroa y los parlamentos de Gasteiz e Iruñea. Confebask y la CEN se han negado a negociar, mientras que en el Parlamento de Gasteiz, PNV y PSE -los socios del Gobierno de Lakua, rechazaron junto a PP y Vox una ILP respaldada por 138.495 firmas. En Nafarroa, el bloqueo institucional se plasmó en la negativa a tramitar la ILP argumentando que no se tienen competencias para fijar un SMI propio. Estaba respaldada por 18.316 firmas de trabajadoras y trabajadores. La demanda sindical es consciente de ello y su propuesta incluye la demanda de que se modifique el artículo 27 del Estatuto de los Trabajadores en el Congreso de los Diputados, para permitir a los gobiernos de Lakua y Nafarroa -y a cualquier otro gobierno autonómico- poder fijar un SMI propio. La demanda vasca fija en 1.500 euros el SMI propio para poder hacer frente a las necesidades y poder construir una vida digna. La huelga se desarrollará bajo el lema “Gutxieneko soldata hemen erabaki. SMI 1.500 euro. Mejorar salarios para repartir la riqueza”, que ya se ha empleado en las movilizaciones que han llevado a cabo. El anuncio de la convocatoria de la huelga general se realizó ayer mediante sendas comparecencias ante los medios en Bilbo e Iruñea, en las que criticaron duramente el bloqueo político y empresarial a la reivindicación de un SMI propio. «Es muy grave que los representantes políticos nieguen a la sociedad el único camino para proponer cambios legales; están limitando enormemente la democracia», destacaron en la comparecencia. «Se ha despreciado un ejercicio de autogobierno y soberanía que busca defender los derechos de la clase trabajadora. Tanto los gobiernos de Gasteiz y de Iruñea como las patronales quieren imponer la legislación laboral española para precarizar aún más a la clase trabajadora vasca», añadieron. UGT Y CCOO EN NAFARROA En la comparecencia de Iruñea. Imanol Pascual (ELA) e Imanol Karrera (LAB) destacaron que en Nafarroa, a diferencia de otros territorios, UGT y CCOO se han sumado a la estrategia de bloqueo de la reivindicación de un SMI propio de la CEN y el Gobierno navarro. Calificaron de «incomprensible» la posición de estos dos sindicatos y de «antidemocrático» que la lehendakari María Chivite no haya siquiera aceptado reunirse con los sindicatos que impulsan esta demanda. «Representamos al 40% de los trabajadores navarros», subrayó Pascual. De este modo, criticaron el contrasentido que supone que desde la patronal y el Gobierno navarro realicen constantes llamamientos al diálogo cuando se cierra la puerta a cal y canto ante la reivindicación de un SMI propio. Karrera añadió que es la patronal CEN quien marca la política del Gobierno navarro y reclamó una reflexión al respecto. Calificó de «hipócrita» la posición de UGT y CCOO y preguntó «qué tienen que ocultar» para oponerse en Nafarroa a una demanda que sí reclaman en otros territorios. EFECTOS POSITIVOS Los sindicatos convocantes destacaron, además, que «el aumento del SMI tendría su efecto en la negociación colectiva, contribuyendo al alza del resto de salarios, por lo que esta huelga general es una cita ineludible para el conjunto de la clase trabajadora». «Se trata de un punto de inflexión para lograr un mejor reparto de la riqueza mediante la mejora de los salarios», defendieron. «El logro de un SMI de al menos 1.500 euros contribuirá a reducir la brecha salarial impuesta a las mujeres trabajadoras. Asimismo, tendrá una consecuencia directa en los colectivos más precarizados (jóvenes, migrantes o personas con diversidad funcional)», incidieron. «Dicho SMI se convertiría en la base de un sistema de protección social que hoy en día es muy insuficiente. Esos 1.500 euros deberían convertirse, asimismo, en la pensión mínima, lo que vendría a cumplir una de las reivindicaciones principales del Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria. Y deberían ser suficientes para acceder a una vivienda y desarrollar una vida independiente», subrayaron. Asimismo, destacaron que «la huelga general del 17 de marzo va a suponer un paso adelante de la sociedad para reivindicar su participación democrática en las decisiones políticas, concretado en el derecho a decidir de Hego Euskal Herria en la fijación del SMI y, por extensión, del resto de salarios y prestaciones sociales». MÁS AUTOGOBIERNO Desde Nafarroa subrayaron que la asunción de la competencia para fijar un SMI propio sería un avance importante en el autogobierno. En este sentido, Karrera lamentó que el Gobierno navarro haya optado por no defender su autonomía y destacó que «un autogobierno que no pueda fijar un SMI propio no es el autogobierno que necesita la clase trabajadora de Nafarroa». Así, ELA, LAB, Steilas, Hiru y Etxalde subrayaron que «la reivindicación central de esta huelga comporta un ejercicio de soberanismo en clave social: un mejor reparto de la riqueza y una mayor cohesión social a través de nuevas competencias para Navarra, frente a patronales y gobiernos que quieren imponer las leyes aprobadas en Madrid para utilizarlas para precarizar a la clase trabajadora navarra». Los portavoces de los sindicatos navarros recordaron que la tasa de pobreza en este herrialde ha subido de un 12% a un 18% en un ciclo expansivo de la economía. Karrera destacó que uno de cada dos trabajadores navarros está en situación de precariedad y que con un sueldo por debajo de los 1.500 euros que reclaman como mínimo es muy difícil vivir actualmente en Nafarroa. En este sentido, subrayó que aunque se puedan subir los sueldos, aumenta la brecha salarial y la pobreza se incrementa, lo que calificó de «inaceptable». Torres reclama «diálogo» tras cerrar la puerta La reacción del Gobierno de Lakua vino de la mano del vicelehendakari y consejero de Economía, Trabajo y Empleo, Mikel Torres, quien apeló «al diálogo» como forma de llegar a un acuerdo sobre un SMI propio a través de la negociación colectiva, aunque mostró su «respeto» por la decisión de los sindicatos de convocar una huelga general. Todo ello tras cerrar la puerta al debate de la ILP en el Parlamento de Gasteiz. «Sí nos sorprende que hagan una convocatoria de huelga a tres meses vista, con lo cual se supone que vamos a ver tres meses de reivindicaciones y, sobre todo, de calentar ese tema. El compromiso del Gobierno vasco -lo ha reiterado hace pocas fechas también el lehendakari- es de que haya un salario mínimo de negociación colectiva en Euskadi y el camino para realizarlo es a través del acuerdo, de la negociación, del diálogo», señaló en declaraciones a los medios. Por ello, hizo un llamamiento a patronal y sindicatos para que «se sienten a hablar». «No hace falta llevar a ningún sitio la reivindicación. Tenemos esa potestad», apostilló. Torres manifestó que Lakua ya puso «encima de la mesa» un estudio sobre la realidad socioeconómica y sociolaboral de la CAV, en el que se establecía «un rango» [entre 1.268 y 1.835 euros en catorce pagas] sobre lo que podría ser ese salario mínimo de negociación colectiva, así como unas condiciones. Destacó que, asimismo, se hacía un análisis según el cual el SMI «no era el problema real del mercado laboral», que afectaría a un 3% de los trabajadores, sino que habría «otra serie de aspectos a abordar mediante el diálogo». El vicelehendakari Torres insistió en que Confebask y los sindicatos tienen «la mano tendida» del Gobierno de Lakua y les pidió que «reflexionen sobre el diálogo como la mejor solución para poder llegar a acuerdos». GARA BLOQUEOLos sindicatos denunciaron que la demanda del SMI propio está bloqueada por las patronales Confebask y CEN, los gobiernos de Lakua y Nafarroa y los parlamentos de Gasteiz e Iruñea. EUSKO GANBARAKLas cámaras de Comercio de la CAV, agrupadas en Eusko Ganberak, defendieron ayer que «hay que dialogar y negociar, pero no amenazando, sino reflexionando sobre la situación del país», según señaló el responsable de la Cámara alavesa, Gregorio Rojo. MILES DE FIRMASLa Iniciativa Legislativa Popular (ILP) para que el Parlamento de Gasteiz tratase sobre el salario mínimo propio fue respaldada por 138.495 firmas. En el Parlamento navarro se presentaron 18.316 firmas. A ambas iniciativas se les cerraron las puertas antes del debate. 1.500 EUROSLa demanda de la mayoría sindical reclama que se fije un salario mínimo interprofesional (SMI) de 1.500 euros, lo que permitiría una mejora en el reparto de la riqueza. La fijación del SMI por el Estado español impide que se pueda alcanzar esta cuantía.