Oportunidades con gato encerrado

No lo consiguieron la semana pasada, con lo que Athletic y Real han visto crecer ganas y necesidad de reencontrarse con la victoria. Las rojiblancas, para no descolgarse definitivamente de la pelea por el título; las donostiarras para recuperar su plaza en zona copera.

La jornada parece propicia para sus intereses, con rivales de potencial inferior enfrente. Pero en ambos casos, puede haber gato encerrado. El de un equipo con más calidad que cartel, en el caso del Sant Gabriel, que visita Lezama. «Ha llegado el entrenador del Rayo, se han reforzado con jugadoras importantes... Es un buen equipo -resume Juan Luis Fuentes-. Fuera de casa no están consiguiendo buenos resultados pero en casa golean y lo que hoy he visto es que es un equipo muy fuerte, así que no podemos cometer el error de pensar que, como se ha acabado nuestro «Tourmalet», todo lo que viene es fácil. He insistido mucho en eso esta semana». La otra gran dificultad puede residir en el estado de ansiedad de las rojiblancas, tras haber enlazado tres derrotas. «Tenemos que evitar las prisas -admite el técnico-. Se puede ganar bien, por la mínima, en el minuto uno o en el noventa, así que hay ir con tranquilidad. Madurar el partido y hacer valer el factor campo y el que somos un equipo con muchos recursos y con buenas jugadoras».

Un equipo que, además, no se puede permitir, ahora menos que nunca, un tropiezo. Ni en lo clasificatorio, ni en lo anímico. «Estamos con ganas y con necesidad -reconoce Fuentes-. Sobre todo anímicamente, porque es una situación muy poco habitual, estamos mal acostumbradas en ese sentido, aunque estas sean situaciones que se dan en el fútbol. Pero necesitamos un refuerzo anímico y, por supuesto, también los tres puntos para por lo menos estar hasta el final con opciones de disputar algo».

El último, pero no menor, hándicap vuelve a residir en la enfermería, a la que, lamentablemente, las rojiblancas parecen haberle cogido el gusto esta temporada. Si la pasada jornada se saldaba con la buena noticia de la recuperación de Nekane, esta llega con dos nuevas ausencias en el equipo: la de Erika, que sufre una pequeña rotura fibrilar, y la de Eli Ibarra, con una lesión en el hombro, que podría incluso dejarle fuera del equipo hasta fin de año.

Engañoso

Algo mejor está, en ese sentido, la Real, que ha viajado a Oviedo con las únicas ausencias de Maialen Zelaia y Ainara Herrero. Pero lo ha hecho igualmente necesitada de reencontrarse con una victoria que se le ha resistido en las dos últimas jornadas, lo que le ha relegado a la novena plaza, un punto por debajo de las ansiadas posiciones coperas.

También su encuentro es, en teoría, propicio para sumar tres de tacada, lo que además le permitiría mejorar sus estadísticas a domicilio. Pero tampoco aquí la historia se acaba con el nombre o los números. El Oviedo Moderno es un recién ascendido, sí, y necesitó diez jornadas para celebrar su primera victoria. Pero parece empezar a cogerle el tranquillo a la categoría, atraviesa su mejor momento -cuatro puntos en dos jornadas-, es el equipo defensivamente más seguro de la zona baja, con apenas 13 goles encajados, y, de hecho, ha abandonado incluso posiciones de descenso.

Las donostiarras ademiten que «será un partido difícil, más todavía porque jugamos fuera de casa. Pero estamos con muchas ganas», asegura Uxue Garmendia, más aún tras el «valioso punto» sumado ante el Rayo. La futbolista txuriurdin, además, cree que «el equipo está muy bien y con capacidad para estar más arriba», por lo que confía en regresar de Oviedo con tres puntos más.