Etxerat ha informado de que el oreretarra Aitzol Gogorza, uno de los trece presos que padecen enfermedades graves e incurables, ha sido ingresado en el Hospital de Basurto debido a que su situación anímica ha empeorado.
Sus familiares y los médicos de confianza no han podido reunirse con él todavía, pero esperan visitarlo en las próximas horas.
Gogorza sufre un trastorno obsesivo compulsivo de larga duración, una enfermedad que se le reactivó tras ser detenido en 1999. En noviembre de 2011 le aplicaron el protocolo de acompañamiento de 24 horas, previsto para casos de prevención de suicidio.
Euskal Herria
Los ingredientes para un «lawfare»
Cultura
Jon Sarasua: «Marko ideologiko jakina dago txapelketan, eta pobrea»
Euskal Herria
Lawfare: berria ez den jarduera bat, sei kasu paradigmatikotan
Cultura
‘Cadena perpetua’ cumple treinta años: siempre nos quedará Zihuatanejo
Euskal Herria