La plazuela de Valle Lersundi (Kainoieta) es el emplazamiento de esta escultura, creada por la artista navarra Dora Salazar y que supone el tercero de los «hitos» de la conmemoración del bicentenario de la reconstrucción de Donostia.
Con esta obra se pretender homenajear a la población civil que hizo posible que la capital de Gipuzkoa resurgiera de sus cenizas tras el incendio que la destruyó.
Junto a la escultura se ha colocado una placa con un bertso de Maialen Lujanbio, inspirado en aquellas personas que hace 200 años «decidieron y contribuyeron con su esfuerzo y valentía a reconstruir la ciudad», ha informado el Ayuntamiento en un comunicado.
Al acto de este sábado han asistido, entre otros, el alcalde, Juan Karlos Izagirre, la presidenta de la Comisión Política del Bicentenario y concejala del PNV, Miren Azkarate, y la vicepresidenta de la Comisión Política y edil del PSE, Marisol Garmendia, además de Josu Ruiz y Naiara Sampedro (Bildu), Ramón Gómez e Íñigo Arcauz (PP) y la propia Dora Salazar.
Tras el descubrimiento de la escultura, la Banda Municipal de Txistularis ha interpretado la primitiva marcha-zortziko de San Sebastián y se ha podido disfrutar del espectáculo «Seguimos quemadas», de Kontu Kantoi.
Los asistentes han participado luego en una visita guiada por la Parte Vieja, centrada en la aportación de las mujeres donostiarras a la ciudad, una iniciativa organizada en colaboración con el Museo San Telmo.