La recuperación de la economía vasca llegará en el año 2015, según estima el 61% de los empresarios consultados por la red de auditoría y asesoramiento KPMG. El informe «Perspectivas País Vasco», el primero elaborado por KPMG en base a entrevistas a 33 empresarios y directivos de grandes empresas vascas por su tamaño y facturación, dibuja un panorama positivo para el año 2015, si bien los encuestados reconocen que la CAV atraviesa actualmente una situación «ligeramente más negativa» que el conjunto del Estado español.
Según recoge el informe, los directivos afirman que la economía vasca «continua transitando un complejo panorama». De hecho, el 69% percibe la actual situación como mala, y solo un 21% de los encuestados cree que la mejora de la economía llegará en 2014. Los más pesimistas, el 18%, opinan que se hará esperar hasta el año 2016.
En cuanto al Estado español, si bien señalan una leve ventaja respecto a la CAV en la actualidad, un 46% de los encuestados cree que la recuperación llegará más tarde que a la CAV al situarla en el año 2016.
Aunque parece que los directivos vascos comienzan a ver señales de recuperación, tan solo el 27% cree que sus ventas netas aumentarán a finales de 2013, frente al 40% que confía en que se mantendrán. También respecto a la facturación persisten las perspectivas negativas, puesto que un tercio de los encuestados (33%) cree que las ventas disminuirán.
Seguirán los recortes
A pesar de las expectativas positivas, más de la mitad de los encuestados (52%) manifiesta su intención de ejecutar ajustes en 2013. De ellos, el 94% señala el recorte de costes como la principal iniciativa a desarrollar, mientras que el 59% prevé reducir su plantilla. Otro 12% apunta hacia medidas de desinversión y refinanciación de la deuda para reducir gastos.
Precisamente en materia de inversión, el 64% de los encuestados afirma que la mantendrá en términos similares a los del año anterior, mientras que el 15% señala que la aumentará. De ellos, el 40% avanza que su nivel de inversión crecerá por encima del 5%. Por el contrario, el 21% de los ejecutivos anticipa una reducción de sus inversiones.
Por sectores, el 49% de los directivos califica la situación actual de su sector como regular y el 67% considera que en seis meses seguirá igual. A un año vista, un 44% cree que mejorará.
Los empresarios de la rama industrial son los más optimistas; un 16% considera buena la situación, muy por encima de la percepción de otros sectores. En el caso de la Automoción, una amplia mayoría (67%) considera la situación regular. En el sector de Distribución, ninguno de los encuestados califica de buena la situación actual.
Las buenas noticias que aporta el informe vienen desde el sector exterior, con la consolidación de la presencia de las empresas vascas en el extranjero. De hecho, ninguno plantea desinvertir en sus procesos de internacionalización ya que, según revela la encuesta, para el 36% de los encuestados más de la mitad de su facturación proviene ya del extranjero.
De cara al año que viene más de la mitad de empresas vascas tiene intención de mantener sus inversiones en el extranjero, ya que la internacionalización es una de las opciones escogidas para afrontar la crisis. En esta línea, el 39% de las firmas manifiesta su intención de expandirse. Otro 60%, en cambio, se fija como objetivo mantener su presencia en el exterior, sin abrirse a nuevos mercados.
Los destinos preferidos a la hora de internacionalizarse son esencialmente, los mercados emergentes, con especial preferencia por Latinoamérica, Brasil, Rusia, India y China.
Pese a que el 79% asegura que su estrategia ante la crisis se basa en centrarse en su negocio principal, otra de las fórmulas de las empresas vascas para hacer frente a la crisis es la innovación, ya sea en términos de producto (45%), procesos (36%) o mercados geográficos (3%).
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