Tapia ha dado a conocer este dato sobre reubicaciones que ha recibido hace unos días de la Corporación Mondragón durante su comparecencia en el Parlamento de Gasteiz a petición de EH Bildu, PSE y PP para analizar la situación de la cooperativa Fagor, que se encuentra en concurso de acreedores.

La consejera también ha informado de que se han formalizado 300 prejubilaciones, por lo que de las 1.800 personas que se quedaron sin trabajo tras el cierre de Fagor Electrodomésticos, en los próximos meses puede haber 1.100 personas entre reubicaciones y prejubilaciones a los que se les ha buscado una salida.

Sin embargo, Tapia ha indicado que la Corporación Mondragón no ha dado datos de cuántos eventuales no cooperativistas han quedado en desempleo por esas reubicaciones y ha añadido que el grupo cooperativo tiene por objetivo «reubicar a todos los socios cooperativistas y no tiene problema» en situarlos en puestos que ocupaban los eventuales.

En este sentido ha explicado que la Corporación tiene el «mismo compromiso» con Fagor y Edesa pero no así con la empresa Grumal, de Azpeitia, por no ser empresa cooperativa.

Por ello la consejera ha dejado claro que al Ejecutivo de Lakua le «preocupa exactamente igual» la situación de los cooperativistas como de los que no lo son.

Deuda con proveedores

Tapia ha desvelado que la deuda que ha dejado el cierre de Fagor con proveedores es en este momento de 42 millones sobre una facturación en 2013 de «aproximadamente 136 millones».

Ha explicado que los proveedores más afectados son los de componentes plásticos, distribución de acero y estampaciones y que hay cuatro o cinco empresas en situación «critica», algunas vinculadas con el propio grupo.

Tapia también ha afirmado que el Gobierno de Lakua no ha puesto en duda el modelo cooperativista sino la gestión que ha hecho este grupo y ha opinado que la Corporación Mondragón debe aprender de esta crisis para «revisar su modelo de gestión» y reforzar la competitividad del grupo.

La consejera ha defendido la actuación de Gobierno de Gasteiz en esta crisis y las ayudas otorgadas, ha matizado que no se «arrepienten de nada de lo hecho» y que volverían a actuar igual, al tiempo que ha negado «falta de control» o «ingenuidad» o que se haya «dilapidado dinero».

Ha dejado claro que en el momento en que la Corporación decidió que Fagor no era viable el Gobierno de Ñalia no pudo hacer nada porque el Ejecutivo «está para ayudar y colaborar con las empresas pero nunca va a tomar su lugarÇ.

«No podemos sustituir la voluntad de la empresa», ha asegurado Tapia.