Con los votos a favor de 64 senadores (nueve de ellos republicanos) y la oposición de otros 36, el Senado consigue poner el sello final a un acuerdo bipartidista en el Congreso que llevaba resistiéndose desde 2009.
Los senadores republicanos Ted Cruz, Marco Rubio y Rand Paul, cercanos al movimiento ultraconservador del Tea Party y vistos como posibles aspirantes a la candidatura presidencial en 2016, han votado en contra del acuerdo, al igual que el líder de la minoría republicana senatorial Mitch McConnell.
Obama tiene previsto firmar el presupuesto en cuestión de días para alejar definitivamente la amenaza de que el gobierno federal se quede sin fondos autorizados el 15 de enero, como ya sucedió en octubre durante más de dos semanas, algo que a toda costa la mayoría de congresistas quería evitar.
El presidente estadounidense ha celebrado el acuerdo como «un paso que nos aleja de la visión cortoplacista y de un proceso de toma de decisiones que nos lleva a la crisis y a lastrar nuestra economía».