El Ayuntamiento ha informado este viernes a través de un comunicado que la alcaldesa, Amaia Agirregabiria (Bildu), ha propuesto al resto de grupos políticos del Consistorio que a los vecinos afectados por el incendio se les exima del pago de la tasa de aguas y recogida de residuos, además de quedar exentos de pagar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI).

Los responsables municipales han mantenido en los últimos tres días otras tantas reuniones con los afectados para informarles de la situación y «concretar los siguientes pasos a seguir». Además, se ha creado una comisión permanente para seguir el caso, ante la previsión de que «esa situación pueda alargarse durante semanas o incluso meses».

El objetivo principal en estas primeras horas, además de facilitar el realojo de las familias, ha sido «garantizar la seguridad de las viviendas que están en situación precaria», para lo que se ha procedido a la limpieza y derribo de elementos peligrosos. El Ayuntamiento ha explicado que ha abierto canales para mantener una «relación continua» con la Diputación de Gipuzkoa y con el Gobierno de Lakua.

De momento, la Diputación ha accedido a prolongar el plazo de realojo, que en principio estaba limitado a las primeras 72 horas, y el consistorio solicitará que esta situación se mantenga más tiempo para garantizar la protección de las 34 familias que se han acogido a esta posibilidad. También instará al Gobierno autonómico a que los afectados puedan acceder a las viviendas sociales ofrecidas por el ejecutivo autonómico «a la mayor brevedad posible y en las mejores condiciones».

En los próximos días, el Ayuntamiento recopilará todos los informes que se están elaborando sobre el estado del edificio y asesorará a los vecinos sobre qué pasos dar, aunque «la decisión final deberán tomarla los propios copropietarios».

Respecto a la investigación sobre el origen del fuego, el Ayuntamiento ha recordado que «está en manos de la Ertzaintza», aunque apunta que la hipótesis principal es que fue provocado por una bengala lanzada en la celebración del nuevo año.

La alcaldesa  ha agradecido su labor a los trabajadores municipales, bomberos, policías locales, voluntarios de la DYA, protección civil y servicios de emergencia de la Diputación.

También ha aclarado que la red de abastecimiento de agua de Pasaia surtió a los bomberos durante toda la noche, aunque ha admitido que la presión se redujo en algunos momentos «debido a los trabajos que estaban realizando con las diferentes bombas desde la parte delantera y trasera del edificio», un incidente que «se resolvió inmediatamente».