Una veintena de personalidades alemanas –entre las cuales hay abogados, profesores universitarios, parlamentarios o periodistas– han suscrito un manifiesto bajo el título «La paz en el País Vasco: la participación de Alemania y la UE es necesaria». Esta iniciativa se puso en marcha a raíz de la detención en Mannheim el pasado octubre del exiliado vasco Tomas Elgorriaga Kunze.

En dicha declaración, los firmantes dan la bienvenida tanto a la situación creada hace tres años tras el cese de actividades por parte de ETA como «a los pasos continuos hacia una mayor democracia, la reconciliación social y el respeto de los derechos humanos» en Euskal Herria.

Sin embargo, en el documento se constata que «el nuevo escenario aún está lejos de la paz duradera», ya que restan por resolver numerosas cuestiones como el desarme, el reconocimiento de todas las víctimas, incluidas las de la tortura, la dispersión penitenciaria, los juicios políticos o la situación de los exiliados.

En este último punto hacen referencia a la detención de Elgorriaga, quien «se enfrenta a una posible expulsión a Francia y en última instancia, a España. Desde 2001 Elgorriaga Kunze reside en Friburgo, donde ha vivido y trabajado en la Universidad de Friburgo con total normalidad».

Los firmantes de este manifiesto consideran que es la hora de «romper con la lógica del conflicto violento» y consideran que el exiliado vasco «debería seguir teniendo la posibilidad de vivir en Alemania».

«Creemos que todas estas cuestiones pendientes del conflicto vasco deben resolverse a través del diálogo político. Animamos a Alemania y la UE a comprometerse con el desarrollo del proceso de paz en el País Vasco», concluyen el documento.