Mikel CHAMIZO
Bilbo

Roberto Alagna, un gran Werther para la ópera de Bilbo

La ABAO comienza el 2015 con la reposición de una de las óperas más carismáticas del Romanticismo francés, «Werther« de Massenet, en una producción procedente del Teatro Regio de Torino. La gran estrella de la función será Roberto Alagna, tenor de fama internacional, que tiene en Werther uno de los roles más aclamados de su repertorio. Las cuatro funciones, que tendrán lugar en el Euskalduna entre el 17 y el 26 de enero, estarán dirigidas por Michel Plasson.

«Un pequeño dardo que nos llega directamente al corazón y en el que todos nos vemos representados». Así calificó Cesidio Niño, director artístico de la Asociación Bilbaina de Amigos de la Ópera (ABAO), el nuevo título que subirá a las tablas del Euskalduna mañana y que verá un total de cuatro representaciones hasta el próximo 26 de enero. Se trata de «Werther», de Jules Massenet, un drama lírico en cuatro actos de argumento extremadamente romántico que narra la historia de amor imposible entre los jóvenes Werther y Charlotte.

El clásico universal de la literatura en que está basada, «Los sufrimientos del joven Werther» de Goethe, vio varias adaptaciones al mundo operístico en el Siglo XIX, pero todas han sido eclipsadas por la versión de Massenet, estrenada en 1892 y quintaesencia del Romanticismo francés, con arias tan conocidas como «Pourquoi me réveiller?».

«Werther» es, sin duda, el título más esperado de esta temporada de la ABAO e incluso ha llamado la atención de la comunidad internacional de melómanos. La razón es la presencia de uno de los tenores más famosos del mundo, el italo-francés Roberto Alagna, en el que es probablemente el papel más reconocido de su carrera. Alagna grabó «Werther» junto a su exmujer Ángela Georghiu en 1999 para EMI, en una de esas raras grabaciones casi perfectas en todos los sentidos, y que se ha vuelto referencial para los amantes de la obra.

Aunque en su momento Alagna cantó muchísimos Werthers, en los últimos años ha ido reduciendo el número de presentaciones del personaje. La última ocasión fue en febrero del pasado año, en París, por lo que se ha levantado una lógica expectación por tener a Alagna cantándolo en Bilbo.

Actitud de divo

Alagna es, además, un personaje que excede de lo puramente musical. Su último disco, titulado «Ma vie est una opéra» (Mi vida es una ópera), es un guiño a una carrera muy mediática en la que ha protagonizado situaciones dignas de un divo. La más conocida fue su abandono de una representación en marcha de «Aida» en el Teatro alla Scala de Milán, al ser abucheado tras un aria. Su relación con Ángela Goerghiu, otra gran diva de la ópera, dio pie a rumores de todo tipo.

La última polémica tuvo lugar en diciembre, en el Teatro Real de Madrid, cuando Alagna suspendió la última función de «Romeo y Julieta» de Gounod por las condiciones de humedad, anunciando que nunca volvería a cantar en dicho teatro. Esto puso en guardia a algunos aficionados vascos, por las condiciones de humedad que se podría encontrar Alagna en una ciudad como Bilbo.

Una de las razones de que Alagna recale aquí quizá sea el brindar apoyo a su hermano, David Alagna, director de escena de esta producción procedente del Teatro Regio di Torino, que, según los responsables de ABAO, «recrea maravillosamente el entorno de la ciudad y el interior de las mansiones señoriales donde se mueven todos los protagonistas».

Y es que, lógicamente, Alagna no es el único cantante de este Werther. Como su enamorada Charlotte regresará a Bilbo Elena Zhidkova, una mezzosoprano wagneriana que dejó buen sabor de boca como Brangäne en el «Tristán e Isolda» de ABAO de hace tres temporadas -y «Werther» es una ópera conocida, informalmente, como el «Tristán francés»-.

Junto a ellos completan el cartel la soprano Elena de la Merced como Sophie, el barítono Manuel Lanza como Albert, el bajo Stefano Palatchi como Le Bailli, el tenor Jon Plazaola como Schmidt, el bajo Fernando Latorre como Johann, el tenor Martín Barcelona como Brühlmann y la soprano Susana Cerro como Käthchen.

La dirección musical está a cargo del maestro Michel Plasson, grandísimos especialista en el repertorio francés y bien conocido por estos lares por sus frecuentes actuaciones en la Quincena Musical y con el Orfeón Donostiarra.

Estará al frente de la Bilbao Orkestra y del coro infantil Gaudeamus Korala, protagonistas de un par de páginas preciosas de esta obra cumbre de la historia de la ópera.