Beñat ZALDUA
BARCELONA
Entrevista
GABRIEL RUFIÁN
CABEZA DE LISTA DE ERC AL CONGRESO

«El plebiscito ya lo hicimos, toca ir a Madrid a recordar que lo ganamos»

Siguiendo la línea de Oriol Junqueras de fichar a independientes para sus candidaturas, Esquerra ha situado de cabeza de lista para el 20D a Gabriel Rufián (Santa Coloma de Gramenet, 1982), destacado y mediático miembro de Súmate, la asociación de castellanohablantes independentistas. El objetivo, seguir ensanchando la base soberanista.

Con tupé, vestimenta impecable y la oratoria tranquila y pedagógica que utiliza por igual en un acto de la ANC o en la tertulia de 13TV, Gabriel Rufián recibe a GARA en la sede central de ERC, en la que todavía se le ve algo despistado. No por mucho tiempo.

Para arrancar, ¿a Madrid a qué?

Si estuviésemos en un escenario normal, no haría falta, porque ya votamos y ganamos el 27S. Pero no lo aceptan. Así que hay que ir a defenderlo y a ocupar ese espacio enorme de poder. Para decirles a los que dicen que no ha pasado nada que sí, que vamos a formar una República.

¿Y por qué no con una fórmula como la de Junts pel Sí?

Junts pel Sí fue una propuesta para convertir unas elecciones en referéndum y ganarlo. Y ya se ganó. Ahora estamos hablando de otro escenario. De todos modos, aunque sea por separado, defender el voto del 27S es otra manera de ir juntos.

Por tanto, con Democràcia i Llibertat (CDC), ¿guante de seda?

Venimos de una coalición y les deseamos lo mejor en campaña. Ahora, esperamos que nos vaya un poquito mejor.

¿Un «sorpasso» de ERC el 20D cambia la correlación de fuerzas dentro de JxSí?

Lo importante es que seamos fuertes en el Congreso, para así no regalar la imagen de Catalunya a Albert Rivera, que bajo una cara más joven, más guapa, y con un traje más chulo y una corbata más fina, representa lo mismo que Fraga, Aznar y Rajoy. Son una derecha barnizada, 2.0, «cool» o como se quiera, pero derecha al fin y al cabo.

El unionismo insistirá en que el 20D supone la segunda vuelta del 27S...

Que digan lo que quieran. Nosotros ya conseguimos dos millones de votos y 72 diputados de 135. Ganamos.

¿Pero el independentismo podría llegar mejor a la campaña?

A muchos nos hubiera gustado que se hubiera alcanzado ya el acuerdo (entre JxSí y la CUP). Por nosotros sería esta misma tarde. Pero hay que entender que estamos haciendo algo extraordinario, que no estamos negociando un gobierno autonómico, sino un proceso de desconexión. Lleva tiempo. De todos modos, recuerdo que en Andalucía tardaron tres meses en formar Gobierno y Susana Díaz era una gran estadista.

Si la CUP confirmase definitivamente el veto, ¿Mas debería dar un paso a un lado o habría que asumir elecciones?

Yo no hablaría de veto. La noticia sería que CUP y Junts pel Sí se pusiesen de acuerdo enseguida. Dicho esto, guste más o menos, esto sin Artur Mas no se hace, porque representa a una parte importante del independentismo y porque todo el mundo es imprescindible. Ahora no va de ganarnos entre nosotros, sino de ganar un país, y eso se hace con todos. Y quien diga que no, o no quiere ganar o desconoce lo que tiene enfrente.

¿Puede influir algo en Catalunya un cambio en la Moncloa?

Desgraciadamente, no. Y lo digo por los pueblos de aquel país de países que es España. Si gana el Partido Popular, que no es popular, no va a cambiar nada. Si gana el Partido Socialista Obrero Español, que no es ni socialista ni obrero, tampoco, y si gana Ciudadanos, todavía menos, porque a veces son más de derechas que Rajoy.

Hay quien avanza que, sea cual sea el resultado, llegará una oferta del Estado a Catalunya...

Ni aunque fuese el «apoyaré» de Zapatero. Propongan lo que propongan, estarán faltando a la verdad. Si el gran mirlo blanco de la política española es Ciudadanos, imagínate...

Entiendo que se ha entrenado en 13TV, pero ¿por qué da el paso al Congreso?

No es ningún misterio. Mis padres, que son andaluces, vinieron hace cincuenta y pico años y se conocieron en un mitin del Partido Comunista en Santa Coloma. Eso de hacer política lo he mamado desde siempre, solo que antes lo hacía en la calle y ahora lo haré en otro sitio.

Ha sido una de las caras conocidas de Súmate. ¿Cuál ha sido la importancia de esta asociación en el proceso?

El independentismo empezó a ganar cuando superó su anti-muchas cosas, por ejemplo, su antiespañolismo. Podía ser lícito o no, pero existía. En cuanto lo superó, consiguió interpelar a todo el mundo y decir a la gente que esto no va de cambiar banderas, que la gente no come patria, sino que esto va de tener un país decente para todos. El unionismo pierde porque no supera su anticatalanismo.

Domina perfectamente el catalán, pero en público siempre utiliza el castellano. ¿Por qué?

Vengo de una tradición castellana, pero además es un posicionamiento político. 15 segundos de discurso inequívocamente independentista en castellano se cargan en nada años de campañas contra la inmersión lingüística y contra la supuesta persecución del castellano.