La oposición siria colocó sus peones el lunes en Ginebra para intentar obtener compromisos antes de comenzar la negociación –de forma indirecta– con el Gobierno sirio. El Alto Comisario de la ONU para los derechos humanos, Zeid Raad al-HJussein, advirtió de que los compromisos en ningún caso deben permitir amnistiar a autores de crímenes de guerra o crímenes contra la Humanidad. Esto tipo de actos –bombardeos sobre civiles, 19 localidades asediadas, miles de detenciones arbitrarias– son cometidos a diario en Siria, según la ONU.

Los grupos opositores reclamaron el fin de los bombardeos, el levantamiento de los cercos y la liberación de detenidos.

Después de haber dudado hasta el último instante sobre su participación en las conversaciones auspiciadas por la ONU, finalmente el Alto Comité de Negociaciones, que agrupa a diferentes opositores políticos y grupos armados, aceptó acudir a Ginebra y ayer mantuvo el primer encuentro formal con el enviado especial de la ONU para la guerra de Siria, Staffan de Mistura, si bien el domingo ya se reunió con el mediador.

El Alto Comité no solo se muestra desconfiado ante el régimen sino también ante la ONU, y exige «cosas tangibles y visibles inmediatas». La más urgente sería la liberación de unas 3.000 mujeres y niños encarcelados, cuya lista entregaron ayer, aunque estiman que el número total «debe ser diez veces mayor».

El portavoz de la alianza siria opositora, Salem Muslit, dijo que esperan para hoy una respuesta del Gobierno de Damasco sobre las demandas humanitarias que han planteado, y que recibió «mensajes muy positivos» por parte del enviado de la ONU. Simultáneamente, numerosos diplomáticos de los países implicados llevan a cabo encuentros paralelos.

Por otra parte, Rusia pidió a la OTAN y al Pentágono explicaciones por los recientes ataques de artillería contra localidades sirias por parte de guardias fronterizos turcos. Además, criticó que ni Ankara ni la OTAN han aportado dato alguno que confirme que un caza ruso violó el viernes su espacio aéreo, como habían denunciado.

4.000 huidos en tres días

Igualmente, aseguró que los aviones rusos han destruido más de 1.350 objetivos «terroristas» en Siria durante 468 misiones llevadas a cabo en la última semana. Muchos de estos bombardeos se llevan a cabo en la zona noroeste del país, donde más de 4.000 turkmenos y árabes han cruzado en los tres últimos días la frontera hacia Turquía huyendo de la ofensiva de las fuerzas progubernamentales en la provincia de Latakia.