Solo dos veces interrumpieron con aplausos el discurso de Patxi López ayer en Gasteiz, y las dos fueron cuando hizo referencia a la necesidad de acabar con el euskara como un elemento de marginación para acceder a la Administración pública. El exlehendakari participó en la tarde de ayer en uno de esos micromítines pensados más para las televisiones que para la asistencia en directo.

Patxi López hizo referencia que «les ha molestado mucho un video en el que los socialistas planteamos sin tapujos esta cuestión». Afirmó que «demasiada gente ha sido marginada en el acceso a los puestos de la Administración pública por no saber euskera. Y eso se tiene que terminar; tenemos que compaginar de forma razonable el derecho de los ciudadanos a ser atendidos en euskara, con el derecho de todos a poder acceder a la Administración».

Negó que esto sea un ataque al euskara. Recordó a Fernando Buesa y defendió que «hemos estado detrás de todos los grandes planes de euskaldunización de Euskadi». «Pero –enfatizó– no estamos dispuestos a que sea herramienta de discriminación cuando se puede evitar».

Una campaña difícil

El discurso de Patxi López evidenció lo difícil que es para el PSE hacer campaña cuando los presupuestos de Iñigo Urkullu se han aprobado con sus votos y gobiernan en coalición con el PNV en las diputaciones y las capitales. Y eso obliga a hacer equilibrios, culpando a otros de «la enorme desigualdad que sigue creciendo», pero reivindicando para el PSE los avances sociales que se han dado en estos años porque ellos estaban detrás, y «de los que se quiere apropiar el PNV» para decir que «en Euskadi se vive bien».

Esta dificultad se refleja también en el llamamiento hecho por Patxi López a «sacar el orgullo socialista» y pelear el voto «calle a calle». O, como dijo la candidata Natalia Rojo, «yo no me resigno. Todavía quedan muchos días de campaña».

PSE

«Hay que coger por los cuernos el tema del euskara en la Administración porque se pierde capital humano»

Idoia MENDIA

Candidato a lehendakari