Los responsables de las obras del hotel que la cadena Catalonia está construyendo en el cerro de San Bartolomé han derribado parte de la fachada que conforma la traza de la cruz latina y el concejal de Urbanismo de Donostia, Enrique Ramos, ha ordenado la paralización inmediata de los trabajos.

Ramos ha sido rotundo al explicar que la actuación que se está llevando a cabo de demolición «no estaba contemplada» en la documentación presentada por el promotor y por tanto se trata de «una actuación clandestina y contraria a la normativa vigente».

La orden «suspende, como medida cautelar, los actos de edificación» y da un plazo de un mes para que «la persona responsable solicite la oportuna licencia o, en su caso, previa presentación en el Ayuntamiento de la documentación correspondiente, ajuste las obras a la licencia concedida». Si transcurre este plazo sin presentar dicha licencia, si las obras no se ajustasen a la licencia otorgada «se ordenará la demolición o reposición de los bienes afectados al estado anterior a las obras, a costa de la persona responsable, impidiendo definitivamente los usos a que dieren lugar».

Asimismo, ha advertido de que el incumplimiento de esta paralización «dará lugar, mientras persista, a sucesivas multas coercitivas por plazos de un mes, así como al traslado de testimonio pertinente al ministerio fiscal en el supuesto de existir indicios de que los hechos fueran constitutivos de delito de desobediencia».