En el pleno de control que se está celebrando en el Parlamento de Gasteiz, el parlamentario de EH Bildu Iker Casanova ha preguntado al lehendakari sobre la situación de La Naval, y ha criticado que lo que está haciendo el Gobierno de Lakua «no es suficiente». Por ello, ha reclamado un mensaje «claro» de «compromiso» de inversión pública para «mantener abierto al astillero o acompañar a un potencial comprador», porque «no es una empresa cualquiera».
Urkullu ha reconocido que el astillero es una empresa «extraordinaria», pero ha defendido que al Ejecutivo le corresponde actuar «igual que con el resto de las empresas. El Gobierno vasco, como cualquier institución europea, no puede comprar parte de una empresa en dificultades», y ha recordado que la UE ya le advirtió por carta del riesgo de incurrir en una ayuda de Estado si actuaba de esta manera. «Señor Casanova, no pretenda engañar a nadie y menos a los trabajadores de La Naval».
Además, ha remarcado que «las condiciones en las que se privatizó La Naval también dificultan las acciones por parte del Gobierno».
Urkullu ha explicado que el Ejecutivo se podrá plantear la entrada en el accionariado de la empresa, pero siempre «tras la salida del concurso» de acreedores. «Tenemos que tener mucho cuidado con las acciones que llevamos a cabo para que no se consideren ayudas de Estado. La sola mención a esa posibilidad y en el futuro por parte del lehendakari en una entrevista de radio el año pasado, condujo a la apertura de expediente informativo en competencia europea y la solicitud de aclaraciones muy detalladas», ha recordado.
Urkullu ha comentado que su prioridad se centra en tratar de garantizar la construcción de la draga con Van Oord y atraer inversiones que garanticen la viabilidad futura de La Naval tras la salida del concurso.