
El Ministerio de Migración griego ha anunciado en un comunicado la cancelación de todas las visitas a los campos de refugiados en las islas del Egeo, un examen médico a cada recién llegado, la desinfección diaria de todos los espacios comunes, la suspensión de toda actividad en espacios cerrados, así como de los cursos que ofrecen las ONG.
Las autoridades griegas han exhortado a los migrantes de estos sobresaturados campamentos a no abandonar las instalaciones e incluso a limitar los desplazamientos internos como medida de prevención.
Está asimismo evaluando la posibilidad de distribuir la comida en los campamentos de registro de las islas del Egeo una sola vez al día para evitar contactos.
Aunque hasta ahora Grecia no ha detectado ningún contagio de coronavirus en personas refugiadas, el riesgo es extremadamente grave en los campos de registro de las islas del Egeo, donde más de 42.000 personas malviven en instalaciones con capacidad para acoger a tan solo 6.500.
En estos campos escasean los servicios de saneamiento adecuados o el acceso a servicios médicos elementales, mientras los hospitales de las islas tienen una capacidad de atención muy limitada.
Un grifo para 1.300 personas
El hacinamiento es tal que este mismo lunes una niña de 6 años murió por culpa de un incendio que se originó en la cocina de una tienda y se propagó rápidamente. Los bomberos no pudieron controlarlo hasta dos horas después de darse la voz de alarma.
Médicos Sin Fronteras (MSF) ha expresado su preocupación por la falta de un plan de prevención para hacer frente a un posible brote del coronavirus en estos campos, que no reúnen ni las más mínimas condiciones higiénicas y sanitarias.
«En algunas partes del campo de Moria, solo hay un grifo para 1.300 personas, y no hay jabón. Familias de cinco o seis miembros tienen que dormir en un espacio no superior a los 3x2 metros», señala el coordinador médico de MSF en Grecia, Hilde Vochten. «Por tanto, es imposible cumplir las medidas básicas de prevención del coronovirus, como es el lavado continuo de manos y de guardar la distancia entre personas», subraya.
Advierte que será «imposible contener un brote de coronavirus en los hacinados campos de Lesbos, Quíos, Samos, Leros y Kos». Lamenta que «a día de hoy todavía no hay un plan creíble para proteger a estas personas», ya de por sí en una situación de vulnerabilidad.
_copia.jpg)
Irauli ekimena: Euskal Herriko familia euskaldunen korapiloak askatzeko topagune berria
Localizada la joven de 23 años desaparecida desde el día 25 en Donostia

El primer festival Aske pone la banda sonora a una Euskal Herria libre

La Ertzaintza deja impune la desaparición del test de drogas del hijo de un jefe policial
