Koldo Landaluze
Especialista en cine y series de televisión

‘Errantes sin retorno’, el documental que aborda la tragedia de los exiliados rohingya

Mélanie Carrier y Olivier Higgins estrenan este 28 de mayo su nuevo largometraje documental, ‘Errantes sin retorno’. Un acercamiento a la mecánica cotidiana, miedos y anhelos que comparten los exiliados rohingya en el mayor campo de refugiados del planeta, Kutupalong (Bangladesh).

Este 28 de mayo llegará a nuestra cartelera el largometraje documental ‘Errantes sin retorno, una historia Rohingya’. Dirigido y producido por los cineastas quebequenses Mélanie Carrier y Olivier Higgins, este proyecto está inspirado en el trabajo realizado por el prestigioso fotógrafo Renaud Philippe en el campo de refugiados Kutupalong en Bangladesh, el más poblado del mundo, para dar voz y revelar la dramática situación que vive un pueblo, eternamente perseguido, el de los Rohingya.

En pocos meses, el campo de refugiados de Kutupalong se convirtió en el más grande del mundo. 700.000 personas de la minoría musulmana rohingya huyeron de Myanmar -antes Birmania- en 2017 para escapar del genocidio y buscar asilo en Bangladesh.

‘Errantes sin retorno, una historia rohingya’ capta la mecánica cotidiana de este masificado campo de refugiados a través de poesía y pesadillas, reparto de comida y partidos de fútbol. Los exiliados aportan el relato de una realidad silenciada captada por Mélanie Carrier y Olivier Higgins.

Biólogos de formación, Mélanie Carrier y Olivier Higgins descubrieron las ventajas de la cámara mientras documentaban sus numerosas aventuras. En 2007, dirigieron y produjeron el documental ‘Asiemut’, que narra su viaje en bicicleta de 8.000 km desde Mongolia a la India.

Tres años después, la pareja de directores y productores fundó MÖ FILMS, una productora independiente dedicada al cine documental, cuyo objetivo es contribuir a los debates y desafíos sociales de nuestro tiempo.

Su segunda película, ‘Encounters’, fue seleccionada por el Nacional Geographic Society, ganó varios premios en el extranjero, y su cortometraje satírico de temática medioambiental ‘Ice Philosophy’ se presentó en numerosos festivales y su largometraje documental ‘Québékoisie’ examina la relación entre los quebequenses y las Primeras Naciones.

Una tragedia silenciada

Según reveló Mélanie Carrier, el inicio de esta odisea tuvo su origen  «después de una impactante publicación en Facebook del campo de refugiados de Kutupalong en febrero de 2018 por parte del fotógrafo documentalista Renaud Philippe. Nos dimos cuenta de la magnitud de esta importante crisis humanitaria que ha recibido tan poca cobertura mediática. Abrumada por la dimensión de esta situación y la fuerza de las fotos de Renaud, sugerimos unir fuerzas para crear esta película con el objetivo principal de alertar al público de la tragedia de los rohingya en el exilio. Lo que comenzó como un proyecto de cortometraje se convirtió en un proyecto de largometraje documental».

Por su parte, Olivier Higgins recordó que «nuestra idea era hacer una película profundamente envolvente, lejos de ser un documento puramente informativo. La intención es hacernos experimentar la vida cotidiana en el campo de refugiados más grande del mundo, donde más de 700.000 seres humanos viven en una apretada zona de 13 km². El papel que asumió el refugiado rohingya Kala Miya -Kalam- fue fundamental en esta película. Renaud conoció a Kalam en febrero de 2018 durante su primera estancia en el campo. Kalam se convirtió en un aliado y guía del equipo de filmación en el campo. Como facilitador de producción, traductor y técnico de sonido, él fue quien finalmente hizo posible esta película».

En relación a este papel determinante por parte de Kalam, Mélanie Carrier añadió que «durante el transcurso de las discusiones, la historia personal de Kalam y la poesía que escribía fue tan significativa, tan universal, que decidimos convertirlo en el hilo conductor de esta película. Para nosotros, el enfoque onírico y poético de ‘Errantes sin retorno’ es una forma de hacer justicia a los refugiados».

Finalmente, y en su declaración de intenciones, la pareja de cineastas coincidió en afirmar que «en ‘Errantes sin retorno’ la luz y la oscuridad conviven, al igual que la fuerza y la desesperación, la resiliencia y un profundo sentimiento de injusticia. En el corazón de esta película hay un tema, la infancia, tan doloroso como revelador, que nos obliga a preguntarnos cómo es posible que tal violencia todavía pueda existir hoy en día y quiénes serán las próximas víctimas».