Prendida la mecha por los propietarios de las salas y avivado el descontento por los directores, ahora se suma el malestar de los actores que no están de acuerdo con la apuesta que los grandes estudios están haciendo por la televisión.

Una política que, espoleada por la pandemia, motivó que los largometrajes se estrenaran directamente vía streaming o que se bifurcara dicho estreno tanto en streaming como en salas de cine.

Scarlett Johansson, protagonista y productora de ‘Viuda negra’, denunció el pasado jueves a Disney por incumplimiento de contrato, ya que asegura que el acuerdo que había alcanzado con el estudio garantizaba un estreno exclusivo en cines y gran parte de su salario estaba basado en los beneficios de taquilla.

‘Viuda negra’ logró a principios de julio el estreno más lucrativo de la pandemia al recaudar 80 millones de dólares en cines estadounidenses. La compañía sumó otros 60 millones gracias a los pagos de Disney+, unos ingresos que quedan fuera del contrato firmado con la protagonista.

Sorprendentemente, en su segunda semana en las salas de cine, la venta de entradas cayó en picado hasta convertirse en el peor lanzamiento de Marvel.

A día de hoy, la cinta ha recaudado 320 millones en todo el mundo. Calderilla para una franquicia que rebasaba los 900 millones con facilidad.

Para ilustrar su enfado, Johansson aportó un intercambio de correos de 2019 en el que Marvel admitía que si los planes cambiaban tendrían que «llegar a un nuevo acuerdo».

¿Nadie tose a Disney?

El diario ‘The Wall Street Journal’ estima que la actriz ha perdido unos 50 millones de dólares en dicha operación y la revista especializada ‘Variety’ publicó un artículo que incluía la declaración anónima de un representante de Hollywood en la que se afirmaba «bien por ella. Muchos otros actores están animando a Scarlett y apoyándola. Tiene mucho poder y eso hace que esta sea una conversación visible que pone a Disney en su lugar. Al hacer todo en público, podría cambiar las reglas».

Lo cierto es que, hasta el momento, han sido muy pocas las estrellas que han apoyado a Johansson públicamente porque oponerse a Disney, el estudio más grande del mundo, es, como señaló otro agente, «como pegarse un tiro en el pie».

Disney esperó un año entero para estrenar ‘Viuda negra’ y, finalmente, se decidió por un lanzamiento híbrido en cines y televisión. La pandemia le ha venido como anillo al dedo para promocionar Disney+, su competencia con Netflix.

En abril, el diario ‘Business Insider’ habló con varios empleados de Pixar –propiedad de Disney– que estaban ‘desmoralizados’ porque sus dos últimas películas, ‘Soul’ y ‘Luca’, ni siquiera pisaron los cines y fueron directamente a la plataforma televisiva. Algo que, años atrás, era impensable para el que está considerado como el estudio más importante de animación.

En relación al duelo Johansson-Disney, no hay nada claro. El estudio no tardó en responder a la actriz en tono tajante a través de una nota en la que se decía «esta denuncia es especialmente triste y angustiante en su cruel indiferencia a los efectos horribles, prolongados y globales de la pandemia del coronavirus».

En el comunicado, los de Burbank también afirmaron que pagó a la actriz 20 millones, sin contar honorarios. La defensa de Disney se apoyará en que el contrato con Johansson habla de ‘lanzamiento amplio’ en cines y no de ‘lanzamiento exclusivo, aunque la actriz insiste en que antes de la pandemia ambos conceptos eran equivalentes y no podía interpretarse otra cosa.

Apoyos a Johansson

Tres de los principales organismos feministas de Hollywood –Time's Up, Women in Film y ReFrame– han mostrado todo su apoyo a Johansson a través de un comunicado conjunto en el que «se sitúan firmemente contra el comunicado reciente de Disney que intenta caracterizar a Johansson como insensible o egoísta por defender sus derechos contractuales» y consideran «un ataque de género que no tiene lugar en una disputa de negocios y que contribuye a un ambiente en el que las mujeres son percibidas como menos capaces de proteger sus propios intereses sin enfrentarse a críticas que los hombres».

A este apoyo también se ha sumado un peso pesado de la Industria, Kevin Feige. El jefe del estudio Marvel, ha admitido sentirse «enfadado y avergonzado por la situación que padece Scarlett Johansson» y añadió que él fue uno de los que pelearon para que ‘Viuda Negra’ no se estrenara de manera simultánea en Disney+.

Siguiendo la estela de Johansson podríamos toparnos con el caso de Emma Stone, productora ejecutiva y protagonista de ‘Cruella’. Stone incluyó en su contrato con Disney bonificaciones porcentuales de ganancias por taquilla.

La suma de esta película en su ruta comercial alcanzó la nada desdeñable cifra de 225 millones en taquilla, pero al igual que ‘Viuda negra’, su estreno en Disney Plus provocó que dicha escalada se detuviera de manera repentina, lo que provocó que Stone cobrase menos porcentaje.

Otro caso similar podría ser el de Emily Blunt tras su paso por la reciente producción Disney ‘Jungle Cruise’. Además del consabido estreno en streaming y en pantalla, se suma la desigualdad salarial y la mayor bonificación por taquilla que percibirá su compañero de reparto, Dwayne Johnson.

Warner también en el polvorín Hollywood

En diciembre del año pasado, Warner Bros. se gastó más de 250 millones de dólares en enmendar contratos, algunos de estrellas como Will Smith –‘King Richard’–, Denzel Washington ‘–The Little Things’– y Gal Gadot –‘Wonder Woman 1984’–. Pero nunca llegaron a juicio porque la mayoría de acuerdos incluyen disposiciones de arbitraje.

Cuando el estudio anunció que estrenaría todas sus películas de 2021 por HBO Max, las agencias de representación se revelaron y el director Christopher Nolan resumió el sentir de muchos cuando dijo «algunos de los cineastas y estrellas de cine más importantes de nuestra industria se acostaron la noche anterior pensando que estaban trabajando para el mejor estudio cinematográfico y se despertaron para descubrir que estaban trabajando para el peor servicio televisivo».