El partido entre Villarreal y Alavés, que estaba previsto que se disputase este sábado, finalmente ha quedado aplazado al igual que el duelo entre Sevilla y Barcelona.

El Consejo Superior de Deportes ha concedido la medida cautelar solicitada por el presidente de la Liga, Javier Tebas, que afecta, en especial a los partidos Sevilla-Barcelona y Villarreal-Alavés, que debían jugarse este fin de semana y que se han visto notablemente afectados por los encuentros de la CONMEBOL que impide a los jugadores sudamericanos de estos equipos convocados llegar en las mejores condiciones a sus clubes.

Ambos partidos estaban inicialmente fijados para jugarse el próximo sábado, no pudiendo pasar al domingo, ya que tanto Barcelona como Villarreal deben jugar el martes de la próxima semana sus respectivos compromisos de la Liga de Campeones.

El aplazamiento ha provocado las primeras reacciones, entre ellas las del técnico del cuadro babazorro, Javier Calleja. El entrenador madrileño ha expresado a través de su cuenta oficial de twitter que «no es serio que a estas alturas haya clubes de LaLiga, con sus respectivas aficiones, que no sepan si juegan este fin de semana».

El míster albiazul, que ha pedido «respeto» para el trabajo de los futbolistas, ha añadido que «esta improvisación no es profesional».

Además, a la vista de la decisión del Consejo Superior de Deportes y de cara a no perder ritmo competitivo, Alavés y Sevilla ya han pactado la celebración de un amistoso este jueves en el Pizjuán a las 20.30, que se celebrará a puerta cerrada.