La consejera de Salud del Gobierno de Nafarroa, Santos Induráin, ha alertado del aumento del malestar emocional entre los jóvenes desde el comienzo de la pandemia destacando la necesidad de que exista una detección precoz y se potencie el trabajo de colaboración entre Atención Primaria y Salud Mental.

Así lo ha indicado durante su intervención en el Pleno del Parlamento navarro en respuesta a la interpelación sobre la política en el Área de Salud Mental en Nafarroa realizada por parte de la portavoz del PSN, Patricia Fanlo.

La consejera ha señalado que desde el comienzo de la pandemia «no se ha producido un incremento de la incidencia de trastornos mentales más severos», pero sí se ha apreciado un «incremento y agravamiento de las manifestaciones sintomáticas del malestar emocional».

Estos cuadros, ha enumerado, incluyen síntomas ansiosos, depresivos, una excesiva sexualización, impulsividad, irritabilidad, necesidad de trasgredir, incremento en el consumo de alcohol, alteración del patrón alimentario, comportamientos autoagresivos, violencia, exhibicionismo en redes sociales «con comportamientos que pueden rayar lo delictivo» o una doble vida virtual y real.

Induráin ha subrayado la «importancia que tiene la detección precoz de cara a la prevención» puesto que la pronta intervención evita que arraiguen estos patrones conductuales entre los jóvenes, unos comportamientos que, ha alertado, «se inician a una edad más temprana».

En este sentido, ha destacado la importancia de abordar esta cuestión desde un «espacio colaborativo» entre la Atención Primaria y la Salud Mental poniendo en valor la puesta en marcha de un programa de colaboración «destinado a la mejora de los problemas de salud mental de modo escalonado en función de la complejidad psicopatológica».

El Gobierno, ha señalado, se encuentra desarrollando en III Plan de Salud Mental, que está basado en «mejorar la salud de las personas y reducir la variabilidad, promover la reevaluación y reorganización de los recursos en la red de Salud Mental y promover la intervención comunitaria interdepartamental e intersectorial».

En la actualidad, ha indicado, se está trabajando en las líneas estratégicas de prevención, promoción y erradicación del estigma mediante intervención grupal con el objetivo de “una crianza positiva para padres y madres con trastornos mentales y problemas emocionales severos”.