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Recuerdo a Sara Fernández con el reto de reparar a todas las víctimas de la dispersión

Dieciocho años después de su muerte en accidente a causa de la dispersión, Sara Fernández ha sido recordada en Iruñea en un acto sencillo. Etxerat ha aprovechado para expresar su hartazgo ante el hecho de que haya víctimas de esta lacra todavía sin reconocer y reparar.

La imagen de Sara Fernández, cuya vida truncó la dispersión hace 18 años, este lunes en Iruñea. (Iñigo URIZ | FOKU)
La imagen de Sara Fernández, cuya vida truncó la dispersión hace 18 años, este lunes en Iruñea. (Iñigo URIZ | FOKU)

Como cada año, y en un día siempre especial en Iruñea por la festividad de San Saturnino, Sara Fernández ha sido recordada este lunes por cientos de personas. Ha sido dieciocho años después de su vida se truncara en un accidente provocado por la dispersión, que dejó otra persona herida. Fernández falleció en 2003 cuando se dirigía a Valdemoro a visitar a un amigo preso.

Ha sido un acto sencillo y desarrollado bajo la lluvia y sobre la nieve, en el que Etxerat ha demandado que se reconozca y repare a todas las víctimas de la dispersión. Algo que se va logrando al menos parcialmente en algunas instituciones, como es el caso del Ayuntamiento de Iruñea con Sara Fernández mediante el acuerdo de la pasada legislatura, pero que sigue pendiente en la mayoría de los casos. Y como ejemplo más claro y lacerante han citado la orden judicial para retirar el mural que recuerda en Otxandio a Rubén Garate, otra persona fallecida por esta política carcelaria.

Tras evocar la sonrisa de la malograda joven (solo tenía 34 años), el mensaje central del acto ha subrayado que hay que solucionar esta cuestión «como parte de ese relato amplio y poliédrico imprescindible para poder seguir avanzando en la convivencia».

Ha añadido Etxerat que «el mapa de la dispersión también ha cambiado, pero todavía hay cerca de un centenar de presos y presas vascas en cárceles de la periferia. Y eso no puede ser. Seguimos con la preocupación, con los riesgos y con los gastos económicos que generan estas idas y venidas».

«Hay distancias que continúan demostrando que no hemos llegado a la resolución y la paz. Medidas de excepción que aún se mantienen vigentes y que impiden a nuestros familiares presos hacer su recorrido jurídico en la perspectiva de alcanzar la libertad», han apostillado.

«Por todo ello, seguiremos recordándote Sara, volveremos a alegrarnos contigo aquí en Baratxuri Plaza o donde podamos compartir el tiempo, porque es imprescindible construir esa memoria compartida por todas y todos, como garantía de futuro y de que no volverá a ocurrir», concluye el mensaje.