La campaña de los hombres dirigidos por Jagoba Arrasate es difícilmente criticable. Sin embargo, a diferencia del curso pasado, cuando Osasuna llegó a ser el mejor visitante de toda Europa, este año la cosa ha cambiado notablemente. No son malos números, pero alguna victoria más hubiese permitido al equipo impulsar su ilusión.

Los navarros acumulan 11 puntos en 10 jornadas lejos de El Sadar. Almería y Celta de Vigo han sido los únicos equipos que no han logrado puntuar en su estadio contra los rojillos. Por contra, Betis, Villarreal y Real Sociedad derrotaron a los de Tajonar sin encajar ni un solo gol.

En cuanto a los empates lejos de su casa, Osasuna es el rey con cinco: Real Madrid (0-0), Girona (1-1), Athletic (0-0), Elche (1-1) y Espanyol (1-1). En los tres choques en los que hubo goles, el cuadro de Arrasate comenzó adelantándose. El hecho de no ir a por el segundo tanto, o de realizar cambios algo más conservadores en las segundas partes ha impedido al equipo coger el impulso en dichos desplazamientos.

Los goles están cayendo a cuentagotas. Siete a favor por diez en contra es el pobre bagaje de un equipo que deberá revertir la situación lejos de su morada. Solo el Cádiz, Valladolid y Almería han metido menos goles.

Osasuna afronta un nuevo desplazamiento con la necesidad de sumar una victoria en el José Zorrilla para coger confianza de cara a la señalada cita ante el Real Madrid del 18 de febrero con la que el equipo se despedirá de su afición hasta la ida de semifinales de la Copa ante el Athletic.