Saski Baskonia acudirá a Badalona el jueves, por lo que Joan Peñarroya ha podido ofrecer sus últimas impresiones aún en suelo gasteiztarra en un distendido desayuno de trabajo, en el que el preparador de Terrassa se ha mostrado optimista y ambicioso. Tanto es así, que ha asumido con toda naturalidad su condición de favorito de acceder a la final de la Copa por haberle tocado en suerte una parte del cuadro sin clubes de fútbol ni rivales de Euroliga.

«Estamos pensando en el partido del viernes, pero la idea de todos nosotros es ganar el partido del domingo», ha afirmado sin perder la sonrisa. «¿Si me siento favorito? ¿De qué me sirve ser favorito? Por un lado, es lógico; llevamos cuatro derrotas en la Liga ACB y en nuestro lado del cuadro somos los mejores, pero a partir de ahí, cualquiera puede ganar a cualquiera», ha añadido, con la apostilla de «¿si nosotros estamos a buen nivel, me veo jugando el domingo? Sí».

Y la apostilla a la apostilla. «Pero si los rivales están a buen nivel, o sacamos nosotros nuestra mejor versión o no tendremos opciones», ha advertido.

Cabe recordar que una encuesta realizada por la ACB entre los directores deportivos y entrenadores de los equipos no clasificados para la Copa ubican a Saski Baskonia solo por detrás del Real Madrid como candidato para imponerse en el torneo del KO. Amén de su convencimiento de verse en la finalísima del domingo, Peñarroya ha querido romper una lanza también por el resto de candidatos, en una afirmación con aires más realistas que el habitual discurso «bienqueda».

«Es una evidencia que todo lo que no sea que ganen Barça o real Madrid, será una sorpresa. ¿Que estamos que nos creemos con capacidad de ganar? Lo creemos y lo pensamos. Pero sabemos que tenemos muchísima dificultad por delante el viernes, y lo habrá el sábado si pasamos, y el domingo, ya veremos si están el Barça o el Real Madrid. Este año, los ocho equipos que entran en la Copa llegan con opciones. Durante la temporada, todos han demostrado brillantez y buenos momentos a lo largo de la temporada, y capacidad para ganar a cualquiera», ha incidido. Y en referencia a su propio equipo, ha querido subrayar que «hay que llegar con el convencimiento de que se puede ganar a cualquiera y los jugadores tienen ambición y respeto e intentan mirar a los ojos a cualquier rival».

Ha sorprendido al mentar los problemas físicos de Arturs Kurucs, un inesperado flanco de problemas luego de que, aunque no estén a tope, ha confirmado que Daulton Hommes y Markus Howard, como ellos mismos lo hicieran en el «Media Day» del martes, estarán en la cita copera. Pese a que el peso específico en la rotación del «combo guard» letón es muy limitado, no hay que olvidar que Kurucs es uno de los cupos de formación del Baskonia, por lo que en caso de ausencia del jugador báltico, Joan Peñarroya se vería obligado a hacer un descarte más, puesto que la Liga ACB exige una convocatoria de cuatro cupos formativos en caso de llamar a doce jugadores y tres en caso de convocar a once. De confirmarse la ausencia de Kurucs, solo Raieste, Sedekerskis y Dani Díez ocupan esas plazas, por lo que Peñarroya tendría que dejar fuera de juego a un jugador más entre los comunitarios y extracomunitarios.

«Tirar la puerta»

Joan Peñarroya formó parte del plantel de aquel histórico TDK Manresa que, en la edición de 1996, se llevó la Copa con Salva Maldonado en el banquillo y el mítico Joan «Chichi» Creus como capitán y estrella, autor del triple que derrotó al Barça en la finalísima en la prórroga por 92-94.

«Ganar la Copa como entrenador es algo que ambiciono, sobre todo cuando estás en un equipo como Baskonia. Uno no está en el Baskonia solo para jugar bien. en mi época de jugador no tuve muchas oportunidades de aspirar a muchos títulos, pero en cuanto nos abrieron un poco la puerta, la echamos abajo. Pues ahora tenemos que ir con la misma mentalidad: como tengamos la mínima opción, hay que ir a por ella».

Pero claro, primero hay que batir al Joventut de Badalona en el último partido de cuartos de final de esta Copa. Una Penya que, como es normal, será quien más aficionados tenga en la grada y que el pasado 15 de enero estuvo muy cerca de ganar en el Buesa Arena, aunque al final los de Joan Peñarroya se impusieron por 84-83.

«Será un partido muy distinto», ha avisado no obstante el técnico baskonista. «En el Buesa Arena no jugó Darius –Thompson–, tampoco Steven –Enoch–, y entre ellos tampoco estuvo Pau Ribas».

Obviamente, fue Ante Tomic quien más destaco en aquel encuentro de enero por el bando verdinegro, y ha sido una de las principales referencias del preparador de Terrassa, aunque ha querido diversificar las atenciones.

«Tomic es un fenómeno y me gustaría entrenarlo», ha admitido sobre el pívot croata, de quien ha dicho que «tenía que haber ganado más títulos».

«Es un equipo muy experto que lleva haciendo las cosas bien las dos o tres últimas temporadas. Están ilusionados, son los locales y será un rival complicado por la calidad que atesoran. Anota mucho de dos puntos y tiene referentes como Tomic, un base experimentado como Vives y otro en crecimiento como Andrés Feliz, más la juventud y el liderazgo de Parra, y con un entrenador que conoce muy bien lo que tiene», ha resumido cuando se ha referido acerca de la Penya.

Tampoco se ha mostrado alarmado por la condición de «novatos» en estas lides de ocho de los integrantes baskonistas. «La experiencia es importante pero está muy sobrevalorada», ha dicho. «No creo que jugadores como Darius [Thompson], Markus [Howard], o Matt [Costello] se vayan a echar atrás por el ambiente o la atmósfera de la Copa. Quizá se sorprendan por el ambiente de la calle y con todas las aficiones mezcladas cuando vayan en el autobús al pabellón o vayan por la calle. Pero lo que sí es cierto es que a ellos les apetece jugar en la Copa porque es un ejemplo del deporte mundial», ha dicho.

En ese sentido, ha recordado la Copa de 2017 de Gasteiz, del famoso cántico conocido como «Era campo atrás», que surgió en una jugada en la que Sergi Llull controló un balón que se perdía pero que debió ser sancionado como campo atrás, lo que hubiera supuesto la victoria del Morabanc Andorra que en aquel entonces entrenaba el propio Joan Peñarroya en los cuartos de final de aquel torneo del KO. Curiosamente, ha calificado aquella injusta derrota como «mi mejor recuerdo» por el ambiente que pudo vivir en Gasteiz tras caer eliminado.

«Nunca una derrota fue más recordada que un título. Me quedé con la familia, viví un fin de semana como aficionado y me cantaban la canción por la calle», ha rememorado. «Fue la Copa que más he disfrutado porque he vivido el ambiente», ha indicado, antes de desear que «espero no dormir el domingo por la noche y que me expliquen muchas cosas sobre el ambiente de la Copa»

«Araba Etxea»

En otro orden de cosas, La afición de Saski Baskonia tendrá un punto de encuentro en la Copa del, ubicado junto al Palau Oìmpic de Badalona, llamado «Araba Etxea».

El turno del equipo azulgrana será el viernes a las 21.30, pero esta carpa se pondrá en marcha desde las 13.00 del mismo día con una inauguración que correrá a cargo de la Diputación de Araba, que lidera esta instalación, el representante del club baskonista, Joan Peñarroya, y los capitanes Tadas Sedekerskis y Rokas Giedraitis.

Este será el punto de unión de instituciones, afición y jugadores y no faltará la txaranga baskonista, habitual animadora de todas las ediciones.

El horario diario de esta infraestructura será de 11.00 a 18.00. En este tiempo se llevarán a cabo distintas actividades como catas de productos del herrialde y degustación de la gastronomía, en tres jornadas amenizadas con música para extender la fiesta del pabellón a los aledaños del recinto copero.

La afición baskonista se ha citado el sábado día 18 a partir de las 11.00 , antes de iniciar la tradicional kalejira para terminar con el encuentro de aficiones, que será amenizado por la Txaranga «Biotzatarrak», habitual en los partidos que disputa el Baskonia en el Buesa Arena.