Agustin Goikoetxea
Aktualitateko erredaktorea / Redactor de actualidad

El Observatorio Vasco LGBTIAQ+ insta a que la CAV se dote de una ley integral propia

El Observatorio Vasco LGBTIAQ+ insta a que la CAV se dote de una ley integral que les proteja, y que incluya «a las personas siempre olvidadas: las intersexuales, asexuales, arrománticas, no binarias, queer». Critica la «apropiación institucional» del Día del Orgullo por el PNV, freno a los avances.

Comparecencia del Observatorio Vasco LGBTIAQ+ con motivo del Día del Orgullo.
Comparecencia del Observatorio Vasco LGBTIAQ+ con motivo del Día del Orgullo. (Oskar Matxin Edesa | FOKU)

En el Día Internacional del Orgullo, el Observatorio Vasco LGBTIAQ+ ha instado a las fuerzas políticas representadas en el Parlamento de Gasteiz a que impulsen la redacción de una ley integral propia. «No es una petición caprichosa», han asegurado, apuntando a que esa norma debería detallar medidas concretas en todos los ámbitos yendo más allá de la estatal.

Behatokia aboga por «una ley que nos proteja a todes, y que incluya a personas siempre olvidadas: las intersexuales, asexuales, arrománticas, no binarias, queer... Una ley que contemple la desmedicalización y despatologización de las orientaciones, de las identidades y expresiones sexuales y de género, de las corporalidades no normativas».

Esa ley, consideran, debería estar «anclada en la defensa y protección del principio de autodeterminación personal y corporal. Una ley que promueva el conocimiento y respeto de las personas asexuales y/o arrománticas y naturalice su forma de relacionarse».

Desde Behatokia estiman que la conocida como ley trans, en vigor desde 2023, es «un paraguas general pero incompleto». «Su alcance y contenido quedó muy sesgado y limitado respecto al del proyecto inicial. De hecho –han explicado en la comparecencia ofrecida este viernes en Bilbo– no reconoce, ni actúa ante las circunstancias que vulnerabilizan y discriminan a las personas intersex, no binarias o extrabinarias, asexuales, migradas, o en situación administrativa irregular, entre otras».

Su importancia, han añadido, reside en aquellas competencias de ámbito estatal, como el registral, donde destacan que se haya reconocido el principio de autodeterminación de género, o en otras como la laboral que se delegan en las autonomías para que ejecuten o desarrollen determinadas funciones.

En el caso de la CAV, han advertido de que son muchas y amplias las materias transferidas, aunque dependen de la «voluntad política» de quienes controlan las instituciones autonómicas, forales y locales.

Esa ley integral, han expuesto desde el Observatorio, debe recoger «con detalles medidas concretas en todos los ámbitos que afectan a nuestra vida cotidiana, con recursos específicos, con un calendario concreto y con una supervisión y control independiente del poder político sobre el desarrollo real y efectivo de sus disposiciones».

Hay apoyo suficiente en el Parlamento

A la vista de la actual configuración de la Cámara de Gasteiz y de los programas electorales con los que concurrieron a los comicios del 21 de abril, entienden que el apoyo de EH Bildu, PSE y Sumar lo permitiría. A quienes conforman el Observatorio les complace que esas formaciones políticas mencionen la importancia de la colaboración con las asociaciones representativas del colectivo para elaborar dicha ley y consensuarla «basándola en las necesidades reales y sentidas». Behatokia pone a su disposición el trabajo que ya han realizado para ello.

Por otro lado, les preocupa que EH Bildu mencione la inclusión de «supuestos ‘expertos’» en ese proceso participativo. «Aunque no sea su intención, y estamos convencides de ello, tal propuesta puede servir de coladero en estos foros de personas que realmente trabajen contra nuestros derechos fundamentales», o que «sean realmente ‘peones’ al servicio de los intereses de las fuerzas políticas que las presenten y propongan».

«La historia nos enseña que, en demasiadas ocasiones, ‘los expertos’ han jugado un papel decisivo en nuestra opresión, patologización y discriminación. No se necesitan para identificar nuestras necesidades, ni reivindicaciones. Ni su presencia debe ser contemplada en ningún órgano de control y supervisión», sostienen.

Además, les «indigna y enoja» que el PSE, a quien achacan que tuvo en sus manos impulsar la redacción de la ley en la pasada legislatura, se hayan olvidado de lo que recogieron en su programa electoral y no lo haya incluido en el acuerdo de gobierno con el PNV.

Censuran la actitud «incomprensible» de los jeltzales, «como partido aliado en el Congreso y opositor en Euskadi en materia de protección de los derechos LGBTIAQ+». Han reconocido que apoyaron la segunda reforma de la Ley Trans Vasca, en el tiempo de descuento, sumándose a los proponentes PSE y Elkarrekin Podemos, e incluyendo algunas enmiendas ciudadanas y de EH Bildu.

Les acusan de «apropiación institucional» de esta jornada reivindicativa en Bizkaia. «Este lavado rosa institucional (pinkwashing) no refleja la realidad en la que vivimos, ni la que deseamos», han subrayado.

En referencia a la propuesta de ley integral, demandan que en los actos del Orgullo se respete el protagonismo de los colectivos LGBTIAQ+ organizados, se eviten el protagonismo «exclusivo y excluyente» de asociaciones afines a partidos, así como la «mercantilización y apropiación cultural o ideológica de la lucha de derechos del colectivo por parte de las instituciones o de empresas pública o privadas».

En pleno auge de las fuerzas reaccionarias y la implantación de su discurso de odio, han reivindicado la calle. También la negociación y el consenso como la «única estrategia viable para dotarnos de herramientas antidiscriminatorias efectivas. Porque la riqueza de la diversidad no admite exclusiones, ni que nadie se arrogue la representación del colectivo bajo criterios políticos o unas siglas determinadas, sean las que fueren».

En tal sentido, desde Behatokia han aclarado que no son un colectivo homogéneo ni uniforme. «La línea roja infranqueable solo puede ser la defensa de los derechos humanos», han resaltado.