La segunda reunión de la llamada Mesa de Salud conformada por el Gobierno de Lakua y múltiples agentes ha servido para que el consejero Alberto Martínez presente un denominado «documento de síntesis» en el que EH Bildu o LAB advierten claras insuficiencias.

Tras la reunión, EH Bildu ha explicado a través de la parlamentaria Rebeka Ubera que «este documento no recoge cuestiones que son importantes y que consideramos que deberían estar en el diagnóstico. El modelo de gobernanza, la política de contratación o la definición de la relación público-privada tienen que estar recogidos».

«Consideramos que hay mucho trabajo por delante para poder incorporar cuestiones fundamentales y que han traído a Osakidetza a la situación actual», ha dicho Ubera, que promete que EH Bildu «trabajará incansablemente y de forma proactiva» para lograr un «punto de partida ambicioso para poner en pie Osakidetza».

LAB se ha posicionado de forma similar, para criticar que en el «documento de síntesis» planteado por el consejero no se incluyan sus aportaciones más importantes. También indica que no puede valorar si se trata efectivamente de una síntesis dado que el Departamento de Salud no ha distribuido a los componentes de la mesa el resto de propuestas.

Entre los aspectos relevantes que LAB echa en falta está la consideración de que el objetivo del pacto «sea un sistema sanitario público fuerte». En cuanto a la privatización, explica que si bien se han introducido algunos datos al respecto, «no se valoran esas políticas» pese a ser «una de las principales causas del declive de Osakidetza». «También se han recogido muy pocos datos sobre las políticas aplicadas a las y los trabajadores», añade.

Ve carencias igualmente en información sobre la situación de la atención primaria y sus causas. Y no se han incorporado nuevos datos y valoraciones sobre el uso del euskara, como solicitó este sindicato.

LAB seguirá realizando aportaciones y espera que se atiendan, pero lamenta ya que «la metodología no es la adecuada» y teme que «su objetivo no es construir consensos, sino representarlos».

Martínez destaca la pluralidad de la Mesa

En declaraciones a los medios antes de la reunión en el centro Biodonostia de Donostia –en cuyas inmediaciones se han concentrado representantes de las plataformas, además de la de ‘Unidas por una Exención Lingüística Real’ y trabajadores de los almacenes de Osakidetza en protesta por su desmantelamiento–, el consejero Alberto Martínez ha recordado que el pasado 5 de septiembre comenzaron las actividades del Pacto «con la presencia de diferentes agentes políticos, sindicales, organizaciones profesionales, colectivos de pacientes, y universidades vascas».

Según ha señalado, esa representación se amplía hoy «con cuatro nuevas incorporaciones para elevar la representación social y profesional». Se incorporan así el sindicato ESK, el sindicato de auxiliares de enfermería, la Asociación de Enfermos Mentales y sus familiares y el Colegio de ópticos y optometristas.

Martínez ha subrayado que esto permite contar con «una mesa extensa, plural y multidisciplinar para definir de manera compartida el cambio de paradigma del sistema de salud que a día de hoy nos interpela a todos».

Además, ha apuntado que el objetivo de los agentes que participan en este proceso «es articular las diferentes políticas y programas en torno a una visión integral del sistema de salud, de su presente y de su futuro».

«Trabajamos para alcanzar un acuerdo plural y compartido con el que podamos asentar las bases de la salud del futuro de Euskadi», ha defendido, para añadir que se trata de «un reto de país» y supone, además, «una oportunidad de gran calado».

Tras afirmar que como consejero está «asumiendo este cometido con mucha ilusión y con una vocación real por avanzar por una senda productiva», ha aplaudido que «la dinámica y el trabajo ha sido compartido por todas las partes».

También ha resaltado que este proceso está siendo coordinado por el catedrático de la UPV/EHU Javier Meana, al que ha puesto en valor, y ha agradecido el trabajo que realiza «de una manera desinteresada».

Reuniones bilaterales con plataformas

Alberto Martínez ha anunciado, antes de presidir esta segunda reunión, que está previsto invitar a reuniones bilaterales a las plataformas en defensa de la sanidad pública, para tener en cuenta las «sensibilidades se puedan recoger». Además, ha señalado que la primera fase del diagnóstico «entra ya en su recta final» y lo siguiente será trabajar en «principios, estrategias y gobernanza».

Desde las Plataformas a favor de la Sanidad Pública han exigido que se dote de «contenido» al Pacto Vasco de Salud, porque «los pactos están bien» pero se requieren «soluciones ya» y que «no se privatice más».

En declaraciones a los medios Kontxi Rebollo, miembro de Osasun Publikoa Defendatu (OPA), y Javier Arana, de la plataforma de Tolosa, han señalado que con este Pacto se intenta «tranquilizar» a la población, pero «lo importante es qué contenido va a tener ese pacto».

En este sentido, han subrayado que «lo fundamental no es hacer un pacto sino el contenido» y ver «si se van a parar las privatizaciones, si la política de personal va a ser realmente la que Osakidetza necesita y si la atención primaria se va a potenciar», puesto que eso es lo que «siente que se necesita la población».

En este sentido, han señalado para la ciudadanía «la calidad de la atención» prestada desde Osakidetza «no era la que ellos estaban solicitando y mereciendo» y, a su juicio, «eso es realmente el meollo de la cuestión».

Preguntados por el hecho de que el consejero de Sanidad haya anunciado la posibilidad de que haya reuniones bilaterales con las plataformas para trasladar sus reivindicaciones al Pacto, han señalado desconocer tal anuncio.

En todo caso, han manifestado su deseo de «estar y decir que es lo que pensamos, cuál es nuestro diagnóstico y cuáles son nuestros primeros intereses», que pasan por un «buen funcionamiento de la asistencia primaria, de los ambulatorios», porque ahora «no se estén empleando los medios suficientes».

«Tenemos que tener médicos en todos los PAC», han subrayado, para añadir que «tienen que dar ya una solución para que haya médicos en todos los pueblos. No pueden esperar a llegar a acuerdo con las empresas», han incidido.

Además, han defendido que, si estas plataformas existen, es porque «la gente no está de acuerdo, está sufriendo de sus propias carnes» los problemas de falta de «médicos, de pediatras, de psicólogos» y «eso no puede ser. Los pactos están bien, pero depende para qué y la realidad es que tienen que dar ya soluciones», han reiterado, para incidir, finalmente, en que «no privaticen más, y que lo que han privatizado, poco a poco, vuelva a sistema público».

ELA: «Obra teatral sin cambios sustanciales»

Antes de que comenzara la reunión, ELA se ha ratificado en su decisión de no participar en la mesa para un Pacto de Salud que promueve el Gobierno de Lakua porque hacerlo implica «formar parte de una obra teatral que no supone ningún cambio sustancial» en el sistema sanitario.

En una nota, ELA ha considerado que «ha acertado» al quedarse fuera de la mesa ya que tras analizar el diagnóstico presentado por el Departamento de Salud a los participantes en el foro, la conclusión es que se prevé que «no se produzcan cambios».

Según ha señalado, el estudio ofrece «muchos datos» sobre cuestiones como la prevalencia de la enfermedad o las previsiones demográficas, pero «no explica las causas del deterioro en el ente público de salud» y «si no se analizan las causas del deterioro de Osakidetza es imposible encontrar soluciones», ha advertido.

ELA también ha lamentado que no se aporten datos comparativos «veraces» que muestren que el gasto público en sanidad en la CAV es «muy inferior» al de los países del entorno.

Además, ha criticado que en el documento del Ejecutivo «no se aborda el auge de la sanidad privada» ni se analiza «la privatización de servicios sanitarios».

Tampoco se analizan «los límites competenciales» de la CAV en materia sanitaria ni «las relaciones laborales» y «las condiciones de trabajo» cuando ese es «un problema fundamental y una de las razones principales que explican la falta de profesionales, especialmente la enorme temporalidad que sufre Osakidetza», ha afirmado.

Asimismo, ha censurado que «no se estudia la capacidad de Osakidetza para ofrecer el servicio» en euskara y castellano ni «la vulneración sistemática de derechos lingüísticos de la población» euskaldun.

Para ELA, «todos los elementos que no se han analizado y la tergiversación estadística respecto a la inversión sanitaria muestran un estudio absolutamente parcial».

Ante ello, ELA ha apostado por impulsar el debate social y organizar a la sociedad «para presionar a los agentes que han provocado el caos sanitario actual».