
El presidente electo de EEUU, Donald Trump, ha destacado este miércoles que la «política es dura» en su regreso a la Casa Blanca, aunque agradeció al actual mandatario, Joe Biden, sus esfuerzos para «asegurar una transición pacífica».
Ambos líderes, acérrimos rivales políticos, han comparecido ante la prensa en el Despacho Oval de la Casa Blanca al inicio de su reunión, ofreciendo breves y cordiales declaraciones con las que han inaugurado formalmente la transición.
Biden ha sidoel primero en hablar, dando la bienvenida a Trump y extendiéndole la mano para estrechársela con efusividad. «Bueno, señor presidente electo y antiguo presidente, Donald, felicidades. Espero que tengamos, como ya he dicho, una transición tranquila», ha expresado Biden, mientras Trump lo escuchaba con las manos entrelazadas y ligeramente inclinado hacia adelante en su asiento.
Biden también le ha asegurado que su equipo se encargará de que disponga de todo lo necesario para asumir el poder el próximo 20 de enero de 2025, y ha añadido: «Bienvenido de vuelta».
A continuación, Trump ha tomado la palabra para afirmar: «La política es dura y, muchas veces, es un mundo complicado, pero hoy es un buen día en este mundo. Agradezco mucho que la transición esté siendo así de fluida y que siga así». Biden ha respondido con un escueto «de nada».
Un minuto de declaraciones
La comparecencia ante los medios ha sido especialmente breve. En total, ambos líderes han hablado durante poco menos de un minuto antes de continuar la reunión a puerta cerrada.
Los dos líderes han hablado a la prensa sentados uno junto al otro en sillones, con el fuego de la chimenea crepitando de fondo.
Biden había invitado a Trump a la Casa Blanca en una llamada el 6 de noviembre, un día después de las elecciones en las que el republicano venció a la vicepresidenta, Kamala Harris. Trump aceptó de inmediato y la Casa Blanca anunció el sábado que la reunión sería este miércoles.
Este tipo de encuentros suele ser una tradición para garantizar una transferencia de poder ordenada.
Sin embargo, en 2020, Trump no invitó a Biden a la Casa Blanca tras su victoria. En cambio, el republicano difundió teorías infundadas sobre fraude y ni siquiera asistió a la investidura de su sucesor, siendo el primer presidente de EEUU en no hacerlo desde 1869. Seguidores de Trump llegaron incluso a asaltar el Capitolio, dejando incluso cuatro muertos.
Bromas sobre presentarse a la reelección
Aparte de visitar la Casa Blanca, Trump ha mantenido una reunión con legisladores republicanos en un hotel cercano al Capitolio. Trump ha llegado a la reunión acompañado de Elon Musk, un fiel aliado durante la campaña y al que ayer puso al frente de un organismo de «eficiencia gubernamental». El presidente electo ha bromeado que ya «no se puede quitar (a Musk) de encima».
En un breve discurso, el presidente electo ha alardeado de su triunfo en las elecciones y ha bromeado sobre la posibilidad de volverse a presentar, algo que no puede hacer ya que en EEUU existe una limitación de dos mandatos.
«Sospecho que no me presentaré de nuevo a menos que digan que es bueno, entonces pensaremos en otra cosa», ha apuntado entre risas de los asistentes.

La caza de Karmelo Ikastetxea en tres actos; compra, cierre y venta a una promotora

Igual Cerdán es Roldán, pero la Nafarroa de 2025 no es la de 1994

Potente incendio en la fábrica de LEA, que ha obligado a confinar Abetxuku y parte de Arriaga

Periodismo en tiempos de maraña golpista
