
Un vendaval gunner ha desinflado a base de cañonazos un merengue que ya había dado síntomas el fin de semana de no encontrarse en su mejor momento. Aunque al Real Madrid nunca se le puede dar por vencido, el 3-0 del Arsenal le da mucha ventaja para la vuelta.
Y todo se ha fraguado en una segunda parte excelsa de los pupilos de Mikel Arteta. El técnico vasco ha ensamblado un bloque que juega como los ángeles, es solidario tanto en ataque como en defensa y ocupa todo el campo sin dejar respiro al rival.
La balanza se ha inclinado del lado londinense a balón parado. Declan Rice ha dejado claro por qué el Arsenal desembolsó un dineral por él el verano de 2023 y que le sabe pegar a la pelota, superando barreras y porteros que se pongan por delante.
Sendas faltas en el 58 y 70 –la primera sorteando la barrera rival por un costado y la segunda superando a un gran guardameta como Courtois– han puesto el envite muy franco para los intereses ingleses.
Mikel Merino, en su nueva faceta como ariete, ha colocado la guinda (m.75) a la tarde-noche mágica gunner con una tercera diana también de bellísima factura y calidad. Está claro que el encuentro ha sido cuestión de roscas.
Enfrente, el equipo de Carlo Ancelotti se ha visto superado por todos los costados. Sin llegar a la presión y sin intensidad en los duelos, lo ha confiado todo a un Mbappé que es de lo poco que se salva y a un Vinicius que ni está ni se le espera.
El castigo ha podido ser incluso mayor, pues el cancerbero blanco ha salvado a los suyos, tanto en la primera parte como tras el 1-0 de una goleada mayor, incluidos dos balones que han sacado bajo palos Alaba y Bellingham. Un correctivo en toda regla, vamos.
Mucho tendrán que cambiar las cosas en el Bernabéu –no estará Camavinga al ver la doble amarilla en el descuento– en poco de más de una semana, soportando durante ese intervalo de tiempo las feroces críticas que, a buen seguro, se van a volcar desde la prensa deportiva madrileña.
De momento, y a expensas de lo que suceda en el feudo merengue, por juego e imagen, el Arsenal ha presentado su candidatura a estrenarse con la que sería su primera Champions.
Se impone el Inter en Münich
El Inter ha arrancado una importante derrota del Allianz Arena ante un Bayern al que le ha faltado colmillo en los metros decisivos. Los locales han protagonizado el dominio durante gran parte del choque, pero no han sabido materializarlo en el marcador.
Así, Sommer ha parado en seco cualquier intento bávaro de adelantarse en el marcador durante la primera media hora, especialmente a un Olise que lo ha intentado de todas la maneras posibles.
A partir de ese momento, el duelo ha dado un giro favorable a los italianos, que sí han sabido traducirlo en el 0-1, gracias a una bonita jugada combinativa que ha acabado con la dejada de Thuram y el golpeo con el exterior de Lautaro (m.38).
Tras el descanso, los anfitriones, muy dubitativos durante los primeros compases del segundo periodo, le han ido cogiendo el tono al partido hasta acabar poniendo cerco a la meta interista.
Ha tenido que ser el veteranísimo Müller quien, en el segundo palo y libre de marca, ha puesto el 1-1 en el luminoso (m.85), permitiendo que la eliminatoria quedase abierta para el regreso en San Siro.
Sin embargo, una preciosa contra visitante llevada con mucha precisión y calidad le ha permitido al Inter volver a colocarse por delante y llevarse una ventaja de un gol tras el tanto de Fratesi (m.88), rompiendo una imbatibilidad casera del Bayern en Champions que se prolongaba durante 22 encuentros.

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