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Warren Buffett se retira tras 60 años dirigiendo el conglomerado Berkshire Hathaway

El multimillonario Warren Buffett anunció en la reunión anual de accionistas de Berkshire Hathaway que este año dejará el cargo. Se va una figura que construyó un imperio a partir de una empresa textil en crisis. Defensor de la clase rica y consciente de que las grandes desigualdades eran dañinas

Rueda de prensa de Warren Buffett en Frankfurt en el año 2008
Rueda de prensa de Warren Buffett en Frankfurt en el año 2008 (Arne DEDERT | dpa - EUROPA PRESS)

El multimillonario Warren Buffett anunció este sábado que planea renunciar a su cargo de consejero delegado de Berkshire Hathaway, tras 60 años en el cargo. El anuncio lo hizo durante la reunión anual de inversores del grupo empresarial que se celebra este fin de semana en Omaha, Nebraska.

Buffett, de 94 años, dejó claro de que no venderá ni una sola acción de su compañía. «La decisión de conservar todas las acciones es una decisión económica porque creo que las perspectivas de Berkshire serán mejores bajo la dirección de Greg que bajo la mía», señaló durante la reunión.

Su sucesor, Greg Abel, de 62 años, ha sido vicepresidente de Berkshire desde 2018 y fue nombrado sucesor de Buffett al asumir el cargo de director ejecutivo en 2021. Abel se incorporó a la antigua MidAmerican Energy en 1992, ocho años antes de que Berkshire la absorbiera y la transformara en Berkshire Hathaway Energy.

Reconocimiento de otros multimillonarios

El anuncio provocó una oleada de elogios por parte de otros directores ejecutivos de grandes multinacionales. «Warren Buffett representa todo lo bueno del capitalismo estadounidense y de EEUU mismo: invertir en el crecimiento de nuestra nación y sus empresas con integridad, optimismo y sentido común», declaró Jamie Dimon, director ejecutivo de JPMorgan Chase & Co.

Tim Cook, director ejecutivo de Apple escribió en X: «Nunca ha habido alguien como Warren, e innumerables personas, incluido yo mismo, se han sentido inspiradas por su sabiduría. Ha sido uno de los grandes privilegios de mi vida conocerlo».

El origen de su imperio

Buffett asumió el control de Berkshire en 1965 y, junto con su viejo amigo y socio comercial Charl Munger, que falleció en noviembre de 2023, transformó Berkshire de una empresa textil en crisis en un conglomerado con un valor actual de 1,16 billones de dólares y que posee negocios en toda la economía estadounidense.

En la actualidad Berkshire posee cerca de 200 empresas, entre ellas la aseguradora de automóviles Geico, el ferrocarril BNSF, empresas industriales y químicas, servicios públicos, los helados Dairy Queen, la ropa interior Fruit of the Loom y los caramelos See's. tiene en su haber, asimismo, 264.000 millones de dólares en acciones, que incluyen empresas como Apple, American Express y Bank of America.

El precio de las acciones de Berkshire ha subido un 19% en lo que llevamos de 2025, un resultado extraordinario comparado con la caída del 3% que ha registrado el índice Standard & Poor's 500. Sin embargo, el primer trimestre del año no ha sido especialmente bueno. La ganancia operativa del conglomerado cayó un 14%, hasta los 9.640 millones de dólares desde los 11.220 millones de dólares del año anterior. Especialmente relevantes fueron los 1.100 millones en pérdidas a causa de las reclamaciones de los seguros derivadas de los incendios forestales de enero en el área de Los Ángeles.

El «oráculo de Omaha»

Buffett es conocido con el sobrenombre de «oráculo de Omaha» por su éxito como financiero y especulador. Ayer no quiso dejar ningún titular sobre la actual coyuntura económica y política con una guerra arancelaria en marcha. Se limitó a decir que «el comercio equilibrado es bueno para el mundo» y que «el comercio no debería ser un arma».

«No creo que sea buena idea diseñar un mundo donde unos pocos países digan: 'Ja, ja, ja, hemos ganado'», añadió Buffett. «Creo que cuanto más próspero sea el resto del mundo, más prósperos seremos nosotros». Buffett mantuvo su tradicional optimismo y afirmó que las críticas a las políticas y a quienes las formulan son habituales. «Siempre estamos en proceso de cambio», señaló.

A lo largo de su carrera, Buffett se ha distinguido por una defensa inteligente de su clase. De hecho, llama "Woodstock para Capitalistas" al fin de semana anual en el que los accionistas de Berkshire se reúnen en Omaha. Antes de que estallara la crisis financiera de 2008 reconoció en varias entrevista que «Hay una lucha de clases, sí, pero es mi clase, la clase rica, la que está haciendo la guerra, y estamos ganando».

Pero también es consciente de que el aumento de la desigualdad es insostenible. En el año 2007, en un evento político de recaudación de fondos para Hillary Clinton en Nueva York dijo que «los 400 que estamos aquí pagamos menos impuestos que nuestras recepcionistas o, dicho sea de paso, nuestras señoras de la limpieza. Si formas parte del 1% más afortunado de la humanidad, le debes al resto de la humanidad pensar en el otro 99%».

De ahí que se sumara a diferentes iniciativas que demandaban un aumento de la tributación a los más ricos o se manifestara a favor de mantener el Impuesto sobre Sucesiones. En ese sentido, se ha distinguido por dedicar una gran parte de su inmensa fortuna a donaciones y obras benéficas.