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Iruñea

Iruñea aprueba su primer Plan de las Personas Mayores, que suponen el 25% de su población

El Ayuntamiento de Iruñea ha aprobado su primer Plan de las Personas Mayores 2025-2030, que representan cerca del 25% de su población. Elaborado tras un amplio proceso participativo, buscar prevenir la soledad, la promoción de hábitos saludables y el encuentro intergeneracional.

Cerca del 25% de la población de Iruñea tiene más de 65 años.
Cerca del 25% de la población de Iruñea tiene más de 65 años. (AYUNTAMIENTO DE IRUÑEA)

Dirigido a cerca del 25% de su población, el Ayuntamiento de Iruñea ha aprobado este lunes su primer Plan de las Personas Mayores 2025-2030, que se ha elaborado tras un amplio proceso participativo y que incluye 99 acciones concretas para la prevención de la soledad, la promoción de hábitos saludables y el encuentro intergeneracional.

La encargada de dar a conocer el nuevo plan ha sido la concejala delegada de Igualdad, Acción Comunitaria, Barrios y Diversidad Cultural, Zaloa Basabe, quien ha explicado en una comparecencia ante los medios que su implementación requiere de una inversión que ha llevado a incrementar la partida dedicada a las personas mayores en los presupuestos de 2026 en un 75%, hasta los 347.500 euros (210.000 euros en el capítulo 2 y 137.500 en el capítulo 4).

Como ha explicado Basabe, esta iniciativa «busca mejorar la calidad de vida de este sector de la población, promoviendo su bienestar físico, emocional y social, garantizando su participación activa en la vida comunitaria y asegurando el acceso equitativo a servicios, recursos y un entorno urbano accesible y seguro».

Tres líneas estratégicas

El plan cuenta con tres grandes líneas estratégicas: Promoción del bienestar físico y biopsicosocial; Ciudad accesible, segura y funcional; y Servicios Sociales y recursos comunitarios.

A partir de estas tres líneas, compuestas por ocho temáticas o ámbitos específicos de intervención, se derivan 23 acciones que se concretan en 99 medidas operativas para darles respuesta, algunas de las cuales ya están implementadas y el resto se realizarán en un plazo que abarca de forma progresiva hasta el año 2030.

La primera línea estratégica acoge acciones como el desarrollo de herramientas y programas formativos para identificar situaciones de aislamiento social, con campañas en lugares estratégicos: farmacias, comercios de barrio o centros de salud.

En la prevención de la soledad no deseada se contempla también el fortalecimiento y consolidación de las Redes de Mayores, presentes ya en once barrios de la ciudad, y la extensión del programa ‘Siempre Acompañados’ para reforzar redes de apoyo. También se crea un protocolo comunitario de actuación y se impulsa el voluntariado intergeneracional para acompañar a las personas mayores.

En el ámbito de la mejora de la accesibilidad y con el objetivo de eliminar las barreras arquitectónicas señaladas en el diagnóstico, se propone que las personas mayores participen como un sector más en la puesta en marcha del Plan Integral de Accesibilidad de Iruñea, al mismo tiempo que se irán eliminando progresivamente todas las barreras que dificultan el acceso a edificios públicos y de uso comunitario. El plan se compromete a implantar y mantener pasarelas eléctricas o ascensores en los barrios que lo necesiten.

Y en el terreno de los servicios sociales y recursos comunitarios, se apuesta, entre otras cuestiones, por ampliar la oferta de servicios a domicilio y de apoyo comunitario, con flexibilidad horaria y capacidad de respuesta ágil ante situaciones sobrevenidas.

Otra de las claves es la coordinación entre servicios sociales, sanitarios y entidades del tercer sector, «fomentando la creación de figuras de referencia comunitaria que faciliten el seguimiento personalizado, la derivación adecuada y el acompañamiento», ha explicado Basabe.

La cooperación con asociaciones, comercios, farmacias y redes vecinales se considera estratégica para detectar necesidades y articular respuestas rápidas y cercanas.

Se propone poner en marcha un programa piloto de apoyo y asesoramiento a personas dependientes y cuidadoras, y una red de centros de día, como el que se está terminando en Arrotxapea. También se destaca la implementación de la Historia Social Única, como herramienta para intervenir en situaciones de vulnerabilidad, y la mejora en el sistema de cita previa en las Unidades de Barrio.

Para la elaboración del Plan de Acción, se han realizado 13 sesiones de participación en 11 barrios distintos, así como dos sesiones más tanto a personal técnico municipal de distintas áreas, como a un grupo de diversidad cultural formado por personas mayores de distintos orígenes. En total, se han recogido más de 900 aportaciones por medio de 205 participaciones. El 74% de la participación corresponde a mujeres y el 26% restante, a hombres.

Rápido aumento de las personas mayores

Al igual que otras muchas ciudades, Iruñea experimenta un rápido crecimiento de las personas mayores de 65 años, acelerado en las últimas décadas por el aumento de la esperanza de vida y la caída de las tasas de natalidad.

En abril de 2024, la ciudad cuenta con 19.919 hombres mayores y 28.504 mujeres, un 23% de la población total, con notables diferencias entre barrios en cuanto a la proporción de personas mayores, sus condiciones socioeconómicas y el acceso a recursos: los barrios con mayor índice de vejez (más de 65 años) son Iturrama (38%), Donibane (32%) y Ermitagaña-Mendebaldea (31%).

El 25,3% de las personas de 65 años o más, 12.239 personas, viven solas en Iruñea, porcentaje que alcanza el 34% en las personas mayores de 80 años. A partir de los 90 años, las mujeres representan el 70% de la población; en el grupo de 99 años o más, llegan al 83%. La población mayor tiene mayores niveles de renta neta media (20.372 euros) comparada con otros grupos de edad en la ciudad. El nivel educativo más frecuente entre personas mayores de 65 años es el Bachiller Elemental-EGB (37%).