Se ha notado el regreso de Oyarzabal, aunque no ha bastado para ganar.
Se ha notado el regreso de Oyarzabal, aunque no ha bastado para ganar. (LA OTRA FOTO)
Imanol  Intziarte
Redactor de actualidad, con experiencia en información deportiva y especializado en rugby

Un pecado de juventud de Mariezkurrena deja a la Real sin victoria en el campo del Levante

Kubo, de cabeza, ha adelantado a los donostiarras justo antes del descanso. Tras aguantar el chaparrón en el arranque de la segunda mitad, la Real no ha acertado a sentenciar, y ya en el descuento el potrillo de Astigarraga ha cometido una pena máxima que Dela no ha perdonado (1-1). 

El peaje de la inexperiencia, la tensión de no querer defraudar… Un error de Mariezkurrena, sacando las manos en área propia, ha regalado al Levante un penalti que ha servido a los granotas para empatar el encuentro en el minuto 93. Hasta ese momento la Real tenía en las manos una sufrida y trabajada victoria merced a un testarazo de Kubo justo antes del descanso.

En este debut liguero de Ansotegi en el banquillo, el regreso del capitán Oyarzabal al once ha sido lo más destacado, junto a la titularidad de Sucic y Marín en el centro del campo –premio a sus buenos minutos en Elda– en lugar de Brais y Soler. Además, Aritz ha sido elegido para suplir la ausencia por sanción de Aramburu.

Tras unos minutos chispeantes del Levante, la Real ha pasado a tener la manija del choque, aunque le costaba terminar las jugadas y sus pérdidas metían el miedo en el cuerpo, sobre todo vistos los precedentes.

La primera ocasión ha estado en las botas de Oyarzabal cuando se llegaba al ecuador de la primera mitad, tras un desmarque para el pase en profundidad de Kubo. El disparo del de Eibar, con la derecha y poco ángulo, se ha marchado demasiado cruzado.

El choque ganaba en ritmo y las llegadas se sucedían en ambos lados del campo, aunque faltaba precisión en los últimos metros. La Real, que iba de menos a más, ha podido adelantarse en un saque de esquina en el que Jon Martín se ha impuesto a la defensa granota, pero su testarazo se ha marchado alto (m.36).

La quinta para Zubeldia

A renglón seguido, Zubeldia ha visto una amarilla más que rigurosa que le impedirá jugar frente al Atlético de Madrid. Una baja sensible.

La mejor ocasión local la ha provocado Remiro con una pérdida al intentar regatear a Iván Romero, pero afortunadamente el de Castante ha podido enmendar su error. Y en la jugada siguiente, Oyarzabal ha robado un balón y ha prolongado a Guedes, cuyo centro ha tocado en un defensa antes de llegar a Kubo libre de marca, que ha cabeceado a la red. El japonés, que ha anotado su primer gol con la cabeza desde que viste la camiseta blanquiazul, se ha ido a la esquina en la que estaba la afición blanquiazul, ante la cual ha juntado las manos pidiendo perdón (0-1, m.46).

Han sido las dos últimas jugadas de la primera mitad. En cuestión de segundos, de haber podido marcharse por debajo en el marcador a irse al vestuario por delante. Don Fútbol haciendo de las suyas.

Lo esperable era que el Levante saliera en la reanudación con el acelerador pisado. Dicho y hecho. Había que mantener la concentración, pero un despiste en el saque de una falta ha dejado solo a Pablo Martínez. Remiro ha puesto la mano fuerte para repeler su duro disparo y evitar el empate. 

Los donostiarras trataban de mover el balón para bajar las pulsaciones al duelo, pero no lo conseguían, aunque han tenido una contra en la que Oyarzabal no ha decidido bien cuando le acompañaban Guedes y Kubo.

Ocasiones para sentenciar

En el minuto 70, Zakharyan y Brais han entrado por Guedes y Sucic. Tanto el portugués por su banda como Kubo por la otra han estado muy generosos en el esfuerzo, ayudando en tareas defensivas.

El Levante veía como el crono jugaba en su contra y le hundía aún más en la cola de la tabla, y han comenzado a aflorar los nervios y las entradas subidas de tono. El choque se ponía áspero. Si mantenía la calma, la Real iba a tener metros para sentenciar.

Lo ha evitado Ryan, ex txuriurdin, nuevamente a tiro de Oyarzabal. Los locales ya no llegaban a la presión, y el meta australiano ha tenido que volver a estirarse en un chut de Kubo. Los tres puntos estaban al alcance de la mano, pero había que rematar la faena. Un agotado Marín cedía su plaza a Soler, pitado por su pasado en el Valencia (m.82).

Oyarzabal, que estaba reventado, ha sacado fuerzas para volver a poner en apuros a Ryan. Ha sido uno de sus últimos servicios a la causa antes de ser sustituido por Mariezkurrena, mientras que Astiazaran entraba por Kubo. Ansotegi echaba mano de dos de sus guerrilleros del Sanse para el descuento. 

Y en el 93 Mariezkurrena ha sacado las manos en el área para tocar a Carlos Álvarez, que con su caída ha provocado un penalti que Dela ha transformado (1-1). Durísimo el golpe anímico para el canterano de Astigarraga y para el resto del equipo, que ha realizado un trabajo ímprobo, pero no ha podido certificar su victoria.